Ence Energía y Celulosa y Woodpecker Acquisitions han formalizado el cierre del contrato de compraventa por el que la entidad controlada por Ancala Partners LLP ha adquirido una participación minoritaria del 49% del capital social de Ence Energía, informó la compañía.
En concreto, el grupo presidido por Ignacio Colmenares, que ostentará el 51% del negocio de renovables, ha cobrado un precio fijo inicial de 223 millones de euros, después de los ajustes previstos en el contrato de compraventa.
El cobro del precio aplazado de carácter contingente cuyo importe máximo podrá alcanzar 134 millones de euros está sujeto al cumplimiento de determinadas variables económicas vinculadas al desarrollo de proyectos futuros en un plazo máximo de ocho años.
Asimismo, ambas entidades han firmado un acuerdo de socios en las condiciones habituales de este tipo de acuerdos con el fin de regular, entre otros aspectos, el gobierno y la transmisión de las participaciones de Ence Energía, y la adopción de una serie de decisiones por parte de su consejo.
Con esta operación y con la venta de su planta termosolar, completada esta misma semana, Ence refuerza su balance con 387 millones de euros y cerrará 2020 con una deuda neta inferior a 200 millones de euros y un ratio de deuda neta sobre Ebitda de 2,9 veces. Estas dos operaciones refuerzan su posición financiera para potenciar y diversificar su crecimiento tanto en energía renovable como en biomateriales.
Ampliar la producción de celulosa
El grupo papelero y energético es el mayor generador de energía renovable con biomasa agrícola y forestal en España y para potenciar su crecimiento cuenta con una cartera de proyectos renovables maduros de 405 megavatios (MW), lista para construir a finales de 2021 y que supondría multiplicar por 2,5 su capacidad instalada actual, contribuyendo con ello a la transición ecológica de España hacia una economía neutra en carbono.
Asimismo, Ence dispone de dos proyectos para ampliar y diversificar su producción de celulosa hacia otros biomateriales, también procedentes de fibras naturales sostenibles y con demanda creciente, como son la celulosa para viscosa y la celulosa absorbente para productos higiénicos.
La inversión en estos dos proyectos, contemplada en su plan estratégico, se encuentra pendiente de que se despeje la incertidumbre en torno al Covid-19 y se recuperen los precios de la celulosa.