Enel apuesta claramente por las energías renovables. El Grupo, en el que está integrado Endesa, centra su Plan estratégico para el periodo 2021-2023 y la hoja de ruta para 2030 en la aceleración de la transición energética. Además, lo acompañará con un crecimiento sostenible y rentable para crear un valor significativo y rendimientos atractivos para los accionistas a lo largo del tiempo.
Se espera que el EBITDA ordinario del grupo aumente a una tasa de crecimiento anual compuesta del 5% al 6%, mientras que se espera que el ingreso ordinario neto aumente a un CAGR del 6% al 7% entre 2020 y 2030.
El Grupo espera movilizar inversiones de 190.000 millones de euros en el periodo 2021-2030, impulsando la descarbonización, la electrificación de los consumos y las plataformas para crear valor compartido sostenible.
De esta cifra, la energética, matriz de la española Endesa, invertirá directamente unos 160.000 millones de euros, movilizando los otros 30.000 millones de euros a través de terceros, según ha anunciado la compañía en su Capital Markets Day.
Foco en renovables
Las renovables serán la gran apuesta del grupo en la próxima década, representando casi la mitad de estas inversiones, con un total de 70.000 millones de euros, para casi triplicar su capacidad hasta los 120 gigavatios (GW); mientras que el 46% del esfuerzo inversor se destinará a Infraestructuras y Redes y el resto al área de Clientes. En 2023, la generación renovable en el cómputo total del grupo representará alrededor del 67% de la producción total.
Se espera que la capacidad construida anual promedio aumente a unos 6,5 GW, un aumento de alrededor del 40% en comparación con el plan anterior, llegando al promedio de 9,6 GW por año previsto a lo largo de la década.
En el periodo 2021-2023, el grupo prevé unas inversiones directas de alrededor de 40.000 millones de euros, de los cuales 38.000 millones de euros tendrán por destino el negocio tradicional, denominado 'Ownership', y los 2.000 millones de euros restantes al modelo de negocio para catalizar inversiones en asociación con Enel, llamado 'Stewardship'.
Stewardship se concentrará en desarrollo renovable, red de fibra, transporte electrónico y sistemas de flexibilidad. La tasa de crecimiento de las inversiones frente al plan anterior se sitúa en torno al 36%.
En el caso del negocio Ownership, destinará 15.700 millones de euros para el desarrollo de más de 15,4 GW de nueva capacidad, principalmente en países donde ya tiene presencia.
"Con este nuevo plan estratégico estamos marcando un rumbo para los próximos diez años, movilizando inversiones por 190.000 millones de euros para alcanzar nuestros objetivos en una década llena de oportunidades", afirmó el consejero delegado de Enel, Francesco Starace.
En lo que respecta al beneficio neto ordinario para los próximos tres años, Enel apuesta por un incremento medio en el periodo de entre el 8% y el 10% anual, hasta alcanzar los 6.500-6.700 millones de euros en 2023, frente a los 5.000-5.200 millones de euros previstos para este ejercicio.
Asimismo, prevé un resultado bruto de explotación (Ebitda) ordinario en la horquilla de los 20.700 y 21.300 millones de euros en 2023, tras un crecimiento anual medio en el periodo de entre el 5% y el 6%, desde los en torno a 18.000 millones de euros de 2020.
Más del 90% de las inversiones consolidadas de Enel estarán en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas ("ODS"). Además, según los cálculos iniciales de Enel, entre el 80% y el 90% del gasto de capital consolidado del Grupo se alineará con los criterios de taxonomía de la UE por su contribución sustancial a la mitigación del cambio climático.
Movilidad eléctrica
Por su parte, al final del período del Plan, la división Enel X, centrada en desarrollar la movilidad eléctrica, tiene como objetivo alcanzar unos 780.000 puntos de recarga públicos y privados disponibles en todo el mundo, de 175.000 estimados en 2020 (+4,5 veces). Eso supone aproximadamente 10,6 GW de capacidad de respuesta a la demanda de 6 GW estimados en 2020 (+ 1,8 veces), así como 527 MW de capacidad de almacenamiento de 124 MW estimados en 2020 (+4,2 veces).
Finanzas sostenibles
En la actualidad, las fuentes de financiación sostenible, incluidos los bonos vinculados a la sostenibilidad, los bonos verdes y los préstamos sostenibles representan alrededor de un tercio de la deuda bruta total del Enel.
Se espera que la participación de estas fuentes en la deuda bruta total aumente a alrededor del 50% en 2023 y más del 70% en 2030, ya que la compañía apunta a refinanciar progresivamente los próximos vencimientos y recaudar nueva financiación a través de estos instrumentos sostenibles.
El coste de la deuda de los bonos vinculados a la Sostenibilidad del Grupo es, en promedio, entre 15 y 20 pb más bajo en comparación con un bono convencional, un nivel que se espera que impulse la reducción del costo de la deuda de Enel.
Dividendo, un 7% anual
En lo que se refiere a su política de dividendos, el grupo plantea un incremento medio anual de en torno al 7% en el periodo 2021-2023 en la retribución a sus accionistas, con un esquema "simple, predecible e interesante", indicó la compañía.
Así, abonará 0,38 euros el año que viene, frente a los 0,35 euros previstos para este año, alcanzando los 0,40 euros en 2022 y los 0,43 euros en 2023.