En 2022, Inditex terminó con 5.815 tiendas repartidas por el mundo. Una cifra que supone estar por debajo, por primera vez en 12 años, de los 6.000 establecimientos que la compañía superó en 2012. En aquel entonces, era un momento de expansión alimentado a golpe de aperturas que llegó a su fin con la pandemia y el plan omnicanal que el grupo textil puso en marcha, entre 2020 y 2022, con una inversión de 2.700 millones.
De hecho, el grupo se mantuvo muy activo en el pasado ejercicio en las actividades de optimización de tiendas con 201 aperturas, 186 reformas (que incluyen 94 ampliaciones) y 349 absorciones.
En concreto, se cerraron 122 tiendas de Zara en el mundo (ahora hay 1.885); 79 de Pull&Bear (hasta las 789); 134 de Massimo Dutti (hasta las 548); 111 de Bershka (hasta las 860); 66 de Stradivarius (hasta las 849); y 99 de Oysho (hasta las 457).
Lejos de terminar como se anunció, este cierre de locales seguirá en los próximos años. “Con el proceso de optimización de tiendas físicas vamos a seguir en el proceso de identificar aquellas que no se ajustan al modelo de tiendas”, aseguró Óscar García Maceiras, consejero delegado del gigante textil durante la rueda de prensa en que presentaron beneficios y ventas récord en su último ejercicio fiscal.
El CEO desgranó la idea: tener tiendas más grandes y conectadas con la parte online. Ejemplo de ello es la tienda de Zara de Plaza España, cuya apertura se produjo el año pasado. Además, las ventas en tienda aumentaron en 2022 un 23% debido al crecimiento del tráfico comercial. Este fuerte crecimiento se ha alcanzado con un 10% menos de tiendas y un 6% menos de espacio comercial que en 2021.
“Eso nos hace estar satisfechos por la evolución que hemos tenido en ese proceso de absorber tiendas por otras con mejores ubicaciones”, añadió el directivo, quien avanzó que tendrán un aumento del 3% de superficie bruta el próximo año.
Este plan de reducción queda muy lejos de los años en los que la estrategia de expansión de Inditex era abrir tiendas físicas, especialmente a partir de 2011 (que cerró con 5.527), 2012 (con 6.009) y 2013 (con 6.340 tiendas). El ritmo de aperturas era de entre 300 y 500 locales al año.
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Y esto continuó en 2014 (cerró con 6.683 tiendas) y 2015 (7.013 establecimientos). De hecho, sólo hay que echar la vista atrás unos años para ver los mayores niveles de tiendas de la compañía. Estamos hablando de 2016 (7.292 tiendas), 2017 (7.475), 2018 (7.490) y 2019 (7.469).
Es justo con la llegada de la pandemia y la puesta en marcha del proceso de transformación de Inditex -en un modelo de negocio que apuesta por el online y la omnicanalidad-, cuando se notan los cierres de tiendas. En concreto, en 2020 terminaron el año fiscal con 6.829 tiendas y el año 2021 con 6.477 tiendas.
4% más online
La otra parte del plan omnicanal, el online, registró en 2022 unas ventas de 7.806 millones de euros (un 4% más que en 2021). Cifra positiva, aunque las tasas de crecimiento parece que se ralentizan si tenemos en cuenta los datos de un año anterior.
En 2021, la venta online creció un 14% para alcanzar los 7.500 millones de euros, un 25,5% de la venta total en 2021. Por aquel entonces, Inditex se marcó como objetivo que la venta online superara el 30% de la venta total en 2024, pero en sus últimos resultados esta cuota ya no está entre sus objetivos.
La compañía defiende que ya no es posible diferenciar entre venta online y física -está en 213 mercados en alguna o ambas modalidades-, pero que la idea va a seguir siendo avanzar en el ecommerce. “El online ganará presencia en las ventas totales y vamos a seguir invirtiendo”, añadieron.