Los socialistas valencianos han bloqueado hasta en 15 ocasiones en los últimos cinco meses el Plan de Acción Territorial Sectorial del Comercio de la Comunidad Valenciana (Patsecova) que impulsa la Conselleria de Economía de Rafael Climent (Compromís).
¿La razón? La introducción en el plan de una licencia autonómica para abrir supermercados de más de 1.000 metros cuadrados fuera de la trama urbana consolidada de los municipios y el “impacto territorial” que se le atribuye a estas tiendas.
La Asociación de Supermercados de la Comunidad Valenciana (Asucova), patronal que vela por los intereses de Mercadona, Consum o Masymas, se opone frontalmente a estas novedades.
Entiende que dejará al albur de los políticos sus futuros desarrollos, que ralentizará sus nuevas aperturas y que además abre la puerta a la introducción de impuestos que graven su actividad, según explican a Invertia fuentes de la entidad.
Ante tal choque de posturas, el PSPV, formación del presidente valenciano Ximo Puig, ha tomado partido en defensa del sector, uno de los más relevantes de la economía autonómica por la presencia en la Comunidad Valenciana de grandes firmas como Mercadona y Consum. En esta línea, ha rechazado en un total de 15 ocasiones el plan propuesto por el área de Compromís, según el recuento realizado por la propia coalición.
'Consellet'
La quincena de negativas por parte de los socialistas se ha producido en el llamado consellet, la reunión de Gobierno celebrada los jueves previa al Pleno del Consell que tiene lugar los viernes. Según apuntan las mismas fuentes, solo hay otra medida del Ejecutivo valenciano que haya acumulado una cifra superior de desencuentros entre ambos socios: el decreto impulsado para regular espectáculos y escuelas taurinas, al que se opuso Compromís.
En esta ocasión es el PSPV quien no parece dispuesto a ceder. “Es importante llegar a un acuerdo con diálogo y consenso, para ir de la mano con el sector. Lo que se quiere evitar es regular teniendo en contra al 80% del sector (Asucova)”, advirtió este jueves al respecto la Conselleria de Política Territorial y Obras Públicas, en manos de socialista Arcadi España.
Negociaciones
Ante el bloqueo del PSPV, Economía ha reabierto la negociación con Asucova, pero las posturas parecen lejanas todavía. Ambas partes precisan a este diario que el departamento de Compromís ha propuesto elevar a 1.500 metros cuadrados el umbral a partir del cual se exija la licencia autonómica fuera de la “trama urbana consolidada”. Pero los supermercados no parecen dispuestos a que esta cifra sea inferior a los 2.000.
Asucova vislumbra dos problemas. Si imponen la licencia autonómica para abrir supermercados de más de 1.500 metros cuadrados fuera de los núcleos urbanos, buena parte de sus futuras aperturas quedarán sometidas a este trámite, que consideran que se traducirá en retrasos para su materialización.
Por otra parte, consideran peligroso plasmar en el plan el “impacto territorial” que se le atribuye a estas instalaciones -sin informes técnicos que lo justifiquen, según denuncian-. Tal circunstancia, agregan, abre la puerta a la creación de nuevos impuestos a los supermercados, tal y como le ha ocurrido al sector en Cataluña. Según advierte, la Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente, también en manos de Compromís, ya ha manifestado su predisposición a implantarlos.
La Conselleria de Economía, por contra, considera que los socialistas se han alejado del compromiso de Gobierno plasmado en el Pacto del Botánico para impulsar este plan -que acumula años de retraso- con el propósito de ordenar territorialmente el comercio.
A su juicio, es lógico que la Generalitat Valenciana deba aprobar o denegar la licencia a los grandes supermercados cuando estos pretenden implantarse fuera de los núcleos urbanos -en un área industrial, por ejemplo-. Consideran que el propósito del plan es, precisamente, ordenar territorialmente el comercio para evitar fenómenos como la fuga del comercio de las ciudades.