Sacyr obtuvo un beneficio neto de 111 millones de euros en 2022, en contraste con las pérdidas de 189 millones de euros registradas un año atrás, gracias a la mayor actividad de todas sus áreas de negocio, especialmente la de activos concesionales, según ha informado este viernes. La compañía encabeza las ganancias del Ibex 35 al sumar un 6% en los primeros compases de la sesión.
En concreto, el grupo presidido por Manuel Manrique ha reportado unas ventas de 5.852 millones de euros, lo que supone un incremento del 25% respecto a 2021, concentrando las concesiones 2.071 millones de euros, un 40% más.
Según ha explicado la compañía y recoge Europa Press, la mejora de esta actividad se debe a la buena marcha operativa de los activos, a los ingresos de los activos concesionales que se encuentran directamente ligados a la inflación, a la puesta en operación de la nueva autopista Ruta 78 en Chile y de Rumichaca Pasto, en Colombia.
También a los diferentes tramos de otras autopistas como las rutas 2 y 7, en Paraguay, a la mejora de los tráficos de los activos a nivel nacional y la aportación de cinco activos de Agua en Chile y otros en Australia.
En cuanto a los ingresos de construcción dentro de concesiones, aumentaron un 20% como consecuencia del avance de proyectos como el Ferrocarril Central, en Uruguay, la Ruta de la Fruta, Aeropuerto de Arica y Hospital de Buin-Paine, los tres en Chile, y la RSC-287 en Brasil.
El área de ingeniería e infraestructuras ingresó 3.162 millones de euros, un 19% más, gracias a la ejecución de los grandes proyectos en cartera en países como Chile, Colombia, España, EEUU, Perú, Uruguay y Canadá, entre otros.
Por su parte, la cifra de negocios de la división de servicios creció un 8%, hasta los 1.094 millones de euros, apoyada en las dos áreas que componen la división (Medioambiente y Multiservicios) y focalizándose en contratos a largo plazo que priman la rentabilidad, con estabilidad y recurrencia en la actividad.
Ingresos
Los ingresos de Sacyr procedieron en un 54% de Europa, en un 40% de Latinoamérica, en un 4% de Estados Unidos y el restante 2% de otros países.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 1.502 millones de euros, lo que representa un incremento del 63% respecto a 2021, como consecuencia de la entrada en operación de varios tramos de autopistas y de que los activos concesionales tienen ingresos directamente ligados a la inflación.
Este aumento del resultado vino acompañado también de una mejora de la rentabilidad (margen de Ebitda), que se situó en una cifra récord del 25,7%, seis puntos porcentuales más que en 2021 (19,7%).
La cartera de proyectos de Sacyr se elevó el año pasado a los 54.755 millones de euros, un 19% más que en 2021, tras conseguir nuevas adjudicaciones. El 80% de la cartera corresponde a la división de concesiones, el 14% a ingeniería e infraestructuras y, el 6% restante, a servicios.
Deuda neta
En cuanto a la deuda financiera neta, cerró el ejercicio en 7.490 millones de euros, un 24,5% superior, principalmente destinada a la financiación de nuevos proyectos, por lo que se repaga con los flujos de caja generados por los propios proyectos.
Sin embargo, la compañía consiguió reducir en 135 millones de euros su deuda neta con recurso, hasta los 546 millones de euros, en línea con su compromiso de reducirla prácticamente a cero en 2025. Este año acelerará esta reducción con la venta del 49% de Sacyr Agua, del 49% de Valoriza Servicios Medioambientales y de hasta el 100% de Sacyr Facilities.