El abogado de la Confederación Intersindical de Crédito (CIC) Andrés Herzog, que ejerce la acusación popular en el juicio por la salida a Bolsa de Bankia, ha dicho hoy que el rescate de la entidad ha costado 1.000 euros a cada uno de los aproximadamente 22 millones de trabajadores que componen la población activa en España.
El letrado ha iniciado su intervención denunciando cierto "hostigamiento", en relación con la pretensión de las defensas que han pedido que las acusaciones se hagan cargo de las costas del juicio.
Posteriormente ha recordado los términos del rescate de Bankia, que recibió cerca de 23.000 millones de euros de fondos públicos entre la ayuda directa y el préstamo del Frob, un rescate que los gestores de la entidad han atribuido al contexto económico de los años 2011 y 2012.
El problema, ha indicado Herzog, es que no se sostiene que esa crisis financiera sin precedentes afectara sólo a BFA-Bankia, única entidad que tuvo que reformular sus cuentas pasando de 300 millones de euros de beneficio a cerca de 3.000 millones de pérdidas.
La clave reside en las cuentas del ejercicio 2011, las que se usaron para la salida a Bolsa, formuladas en marzo de 2012 y más tarde reformuladas, que "eran falsas", como demostraron durante el juicio los peritos judiciales.
Sobre los dos expertos designados por el Banco de España para asistir al juez instructor, Herzog ha defendido su independencia, pese a que en muchas ocasiones los abogados defensores se hayan referido a ellos como peritos de la Fiscalía.
Ambos, ha dicho Herzog, dejaron claro que las cuentas de 2011 y las del primer trimestre de 2012 eran "falsas", y es que "la contabilidad no es una ciencia, pero tampoco es un chicle que se pueda estirar".