La Autoridad Bancaria Europea (EBA) no está a favor de limitar cuantitativamente los salarios de los altos directivos de la banca, como ha sugerido la vicepresidenta Yolanda Díaz, pero sí de establecer cortapisas a la estructura de pago.
Hace apenas unos días, la también ministra de Trabajo afirmó que existen "múltiples posibilidades, también fiscales, para limitar "retribuciones abusivas" de los altos directivos. El jueves quiso recular apuntando que era tan sólo "una reflexión".
José Manuel Campa, presidente de la EBA, ha afirmado este viernes que desde la institución no están a favor de limitar los importes de los sueldos de los altos banqueros, dado que consideran que es algo que compete al "mercado laboral de ejecutivos".
"Topar los precios no es una medida económica natural, al menos para un economista", ha añadido durante su intervención en un desayuno de Nueva Economía Fórum, en el que ha sido presentado por Carlos Cuerpo, ministro de Economía, Comercio y Empresa.
No obstante, considera que en la EBA son "firmes creyentes" de establecer límites en la estructura de pagos de los sueldos, concretamente en lo relativo al peso del sueldo variable y el fijo o a la existencia de bonus pero no malus, entre otros elementos.
Una visión que contrasta con la reciente decisión de Reino Unido de liberar el pago de la retribución variable para que pueda suponer el doble que la fija, algo que se desvía de la normativa europea. Ana Botín, presidenta de Santander, se mostró recientemente a favor de esta medida.