El Euríbor cierra mayo sin llegar al 4%. El índice al que está referenciada la mayoría de las hipotecas variables en España ha terminado el mes con un dato diario del 3,939%, al filo de la barrera psicológica, mientras que la media mensual se queda en el 3,862%.

Este último dato, el más alto registrado desde noviembre de 2008, es el que se ha de tener en cuenta, porque es el que se utiliza como referencia para actualizar el coste de las cuotas hipotecarias.

Este 3,862% con el que cierra mayo el Euríbor a doce meses se sitúa por encima de su valor en noviembre (2,828%) y en mayo del año pasado (0,287%), por lo que tanto los hipotecados que tengan que revisar sus cuotas de forma semestral como anual con la referencia de mayo van a notar su encarecimiento.

[El Euríbor frena su carrera al alza aunque cerrará mayo cerca del 4% y encarecerá más las hipotecas variables]

Tomando como referencia una hipoteca tipo concedida por 150.000 euros a Euríbor +0,99% a 25 años, las cuotas se encarecerán unos 280 euros al mes o 3.350 euros al año.

Un préstamo con las mismas condiciones pero concedido por un capital inferior, de unos 100.000 euros, también sufriría un encarecimiento, aunque menor. En ese caso la cuota subiría unos 186 euros al mes, que son 2.230 euros al año. No obstante, hay que tener en cuenta que la subida depende de las condiciones de cada hipoteca firmadas a nivel individual.

Con todo, esta subida se enmarca en la tendencia de estabilización que está viviendo el Euríbor a doce meses. Tras seis años en negativo, en febrero del año el índice pasado empezó a moverse, dejando atrás meses anclado en el -0,5%, y llegó a cerrar 2022 cerca del 3%. 

Pero ya a finales del pasado año el Euríbor a doce meses comenzó a frenar. Aunque ha seguido subiendo desde entonces, lo cierto es que lo ha hecho de forma más ralentizada después de meses de subir sin freno.

Al son de los tipos de interés

Detrás de la vertiginosa subida se encuentra el alza de los tipos de interés, que el Banco Central Europeo (BCE) emprendió el pasado verano. Y lo cierto es que el endurecimiento monetario va a continuar, habida cuenta de que Christine Lagarde, presidenta del instituto emisor, se reafirmaba hace unos días en que la prioridad absoluta de la institución es que la inflación se sitúe cerca del 2%. En abril repuntó hasta el 7%.

De esta forma, si el BCE continúa subiendo los tipos de interés es más que probable que el Euríbor continuará al alza. En el momento en que esta política termine es previsible que el índice se estabilizará del todo, pero aún es difícil de vislumbrar su evolución futura, como coinciden todos los expertos.