El banco suizo UBS registró un beneficio neto de 1.000 millones de dólares (904 millones de euros), un 52 % menos, en el primer trimestre de 2023, periodo que estuvo marcado por la compra de su principal rival nacional, Credit Suisse.

Los ingresos del banco entre enero y marzo fueron de 8.744 millones de dólares (7.900 millones de euros), un descenso del 6,8 %. Por su parte, los gastos  de explotación aumentaron un 9%, según los resultados presentados por el entidad este martes.

En el trimestre, UBS recompró 1.300 millones de dólares (1.176 millones de euros) de acciones en el marco de su programa de recompra.

[Credit Suisse registró una salida de activos de 62.479 millones de euros antes de la fusión con UBS]

"Nuestros sólidos resultados y entradas de activos demuestran que continuamos siendo una fuente de estabilidad para nuestros clientes en periodos de gran incertidumbre", destacó Sergio Ermotti, nombrado en marzo consejero delegado de UBS para dirigir el complejo proceso de absorción de Credit Suisse.

Sobre la integración de Credit Suisse ha detallado que "pretendemos reducir activamente el riesgo y el consumo de recursos del negocio de banca de inversión de Credit Suisse. Prevemos que el banco de inversión combinado (excluidos los activos y pasivos que definimos como no esenciales) represente en torno al 25% de los APR del grupo y permanezca centrado y estratégicamente alineado con los productos y capacidades más relevantes para nuestros clientes de gestión de patrimonios".

Y ha añadido que "aun reconociendo la magnitud y la complejidad de la integración y reestructuración de Credit Suisse, creemos que esta combinación representa una oportunidad única para aportar un valor significativo y a largo plazo a todas nuestras partes interesadas".