El Euríbor a doce meses, pese a no dar tregua a aquellos que firmaron una hipoteca variable, lleva dos semanas moderando su subida libre. Una estabilización que podría ser un signo de estar cerca de tocar el 'pico', algo que los expertos de ING sitúan en finales de este año.
El índice cerró el pasado mes de octubre con una media mensual del 2,629% y una tasa diaria del 2,63%. Desde entonces ha seguido subiendo, pero mostrando una cierta moderación a lo largo del mes de noviembre. Durante la pasada semana, sin ir más lejos, se mantuvo estable en el entorno del 2,8%.
Esto no quiere decir que las subidas se hayan detenido. De hecho, el Euríbor se situó cerca de su máximo del año el pasado lunes, en el 2,867%, por lo que todavía es difícil adivinar cuáles serán sus próximos pasos.
Estas subidas, aunque se vayan moderando, van a traducirse en un encarecimiento de las hipotecas variables. Aunque este será diferente dependiendo de las condiciones de cada préstamo, lo cierto es que aquellos que tengan que revisar su hipoteca con la referencia de noviembre lo harán, con los datos a día de hoy, con un 2,797%, que es donde se sitúa la media mesual provisional. Y esto supone un incremento de unos 3,3 puntos porcentuales si la revisión es anual.
Así, una hipoteca tipo concedida por 150.000 euros a 25 años a Euríbor +0,99% se encarecería unos 240 euros al mes (unos 2.880 euros al año). Eso sí, cabe recordar que, como informó este periódico, va a ser a partir de ahora cuando se empiece a notar de verdad la subida del Euríbor, dado que este mes empiezan a repreciarse las hipotecas con la referencia de septiembre (2,233%), cuando se produjo una gran subida.
El 'pico' podría estar cerca
La evolución reciente del Euríbor complica la previsión de cuándo podría alcanzarse el 'pico', es decir, cuándo podría este índice volver a dar buenas noticias a aquellos que firmaron una hipoteca variable, si bien las subidas tan fuertes de 2022 hacen pensar a algunos expertos del mercado que el máximo podría estar cerca.
Es el caso de los de ING. El banco publicó hace unos días el informe Perspectivas del mercado inmobiliario español, en el que sus expertos indican que esperan que el Euríbor "alcance su punto máximo hacia el final de año". "Si la zona euro cae en recesión, la disposición del Banco Central Europeo (BCE) a elevar los tipos de interés más allá también disminuirá", apuntan los expertos de la entidad en este estudio.
Eso sí, esto no quiere decir que las hipotecas vayan a dejar de encarecerse. Como explican en este informe, "es poco probable que se haya alcanzado ya el máximo" en los tipos hipotecarios.
"Los tipos siguen de cerca la evolución del Euríbor a un año, con un pequeño desfase. Mientras que el 1 de enero el Euribor seguía siendo negativo (-0,5%), en octubre ha subido hasta el 2,7% y las nuevas subidas de tipos podrían volver a presionar al alza en los próximos meses", explican.
Evolución imprevisible
Con todo, la evolución del Euríbor, como se ha demostrado en el último año, es imprevisible, razón por la cual muchos expertos no se atreven a ofrecer previsiones a largo plazo, más allá del cierre del año.
Tomando como referencia las de los bancos, desde el servicio de estudios de CaixaBank estiman que este índice alcanzará el 2,56% este año, el 2,73% el siguiente y el 2,51% dentro de dos, mientras que en Bankinter prevén un 2,8% en 2022, un 3% en 2023 y un 2,1% en 2024.
En la misma línea, las estimaciones del mercado, reflejadas en la curva forward (también conocida como tipos implícitos), apuntaban a finales de septiembre que el Euríbor a doce meses se situará este año en el 2,76%, tras lo cual se elevará hasta el 3,46% en 2023 y se moderará en el 3,21% en 2024.
Estas previsiones, en todo caso, cambian casi cada día, principalmente debido a que el Euríbor ha dado muchas sorpresas en los últimos meses. Y es que, como recuerdan los expertos del sector, es prácticamente imposible prever qué pasará en los siguientes. Tiempo al tiempo.