La cuota de una hipoteca variable es un 20% más cara que el año pasado pero aún un 60% más barata que en 2008
Unidas Podemos propone un límite al 'sobrecoste' de estos préstamos por la subida del Euríbor, mientras que ERC quiere crear un fondo de rescate.
15 septiembre, 2022 03:41La vertiginosa subida del Euríbor (del -0,5% de diciembre al casi 2% en el que se sitúa la media provisional de septiembre) trae de cabeza a aquellos que firmaron una hipoteca variable, que ven cómo sus cuotas se han incrementado considerablemente. Con todo, tomando como referencia una hipoteca de unos 150.000 euros, las cuotas mensuales que pagan los hipotecados son un 20% más caras que el año pasado, pero un 60% más baratas que en 2008.
Así lo reflejan los datos proporcionados por iAhorro a este periódico. Según los mismos, en septiembre de 2008, cuando el Euríbor se situaba en el 5%, por una hipoteca variable de 150.000 euros firmada a Euríbor +0,99% a 30 años se pagaba una cuota mensual de unos 935,71 euros. Un importe mucho más alto (+60%) que los 582,52 euros que se pagan a día de hoy por ese mismo préstamo. Con todo, supone un 21% más que el año pasado, cuando el Euríbor se encontraba en mínimos históricos, en el entorno del -0,5%.
Algo similar ocurre cuando se toma una hipoteca con las mismas condiciones, pero concedida por 300.000 euros. En este caso, la cuota mensual en septiembre de este año (1.165,05 euros) es un 37% inferior a la de septiembre de 2008, cuando se pagaban 1.871,41 euros, pero un 21% superior al pasado año (962,6 euros).
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Unos datos que demuestran que el esfuerzo económico actual de los clientes con hipoteca variable es aún inferior al realizado en parte de los últimos catorce años, a pesar del empeoramiento de las condiciones de financiación en los últimos nueve meses.
De hecho, las cuotas fueron bajando sistemáticamente entre 2008 y 2021. Concretamente, para el caso de las hipotecas de 300.000 euros los clientes pagaron cuotas inferiores a 1.000 euros entre 2017 y 2021. En el de las hipotecas de 150.000 euros, durante los seis años de Euríbor negativo abonaron 500 euros o menos.
Propuestas
Unos datos que cobran relevancia teniendo en cuenta que la subida de las cuotas hipotecarias por el avance del Euríbor está siendo protagonista del pleno del Congreso que se celebra esta semana, en el que el nuevo impuesto a la banca ha pasado su primer trámite parlamentario.
En el mismo, tanto Unidas Podemos como ERC han lanzado sus propias propuestas para mitigar el aumento del coste de las hipotecas variables para los clientes. En el primer caso se ha puesto sobre la mesa un tope de un año a las hipotecas variables de las familias vulnerables y en el segundo, la creación de un fondo de rescate para los clientes con estos préstamos.
Dos medidas que generarían un agravio comparativo a los clientes con hipotecas fijas, que durante años han estado pagando intereses más altos precisamente para evitar estas fluctuaciones del Euríbor. Movimientos que durante años han resultado muy favorables para aquellos con hipotecas variables, si bien este año la situación se está dando la vuelta.
"Las personas que han contratado una hipoteca variable son conocedoras del tipo de hipoteca que tienen, sobre todo a partir de 2019, cuando [en la ley hipotecaria] se resaltó el papel de los notarios para explicarles la hipoteca. Saben perfectamente que tienen una hipoteca variable y que está referenciada al Euríbor", explica a este periódico Laura Martínez, portavoz de iAhorro.
Consecuencias
Al margen de este agravio comparativo, dese el sector financiero reconocen a este periódico la dificultad legal y jurídica que tendría establecer un tope a las hipotecas. De hecho, el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, rechazó la puesta en marcha del tope a las hipotecas el martes en una entrevista concedida a TVE al considerar que sería contrario al "tratado de la Unión Europea". "No hay por dónde cogerlo", añade una fuente financiera.
En cuanto a la creación de un fondo de rescate para hipotecados, desde el sector plantean dudas sobre cómo se financiaría, si correspondería a la banca, si se cargaría a las cuentas del Estado o si los fondos se obtendrían de la recaudación del nuevo impuesto.
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Por su parte, el Gobierno también ha rechazado esta propuesta. Según ha valorado el Ministerio de Hacienda, podría generar un "efecto llamada" y que muchos clientes dejaran de pagar sus hipotecas al contar con este apoyo.
"No se preocupe por la hipoteca, que la paga otro. Esto no es serio", critican desde el departamento que dirige María Jesús Montero, como recogía Europa Press.
Soluciones alternativas
En todo caso, desde el sector financiero defienden que no es necesario tomar una medida así en estos momentos, dado que los bancos negocian habitualmente con los clientes que no pueden pagar sus préstamos.
"Cualquier solución es mejor a que el cliente deje de pagar la hipoteca", apunta una fuente del sector, que reconoce que, especialmente desde la pasada crisis financiera, los bancos son sensibles al aportar soluciones para que el cliente no entre en impago, dado que "son los primeros interesados en que paguen las hipotecas".
Entre estas soluciones se encuentran abaratar la cuota, alargar el plazo de devolución del préstamo, negociar un nuevo tipo de interés o establecer una moratoria o una carencia. Es algo que "se hace cada día", como apunta otra fuente.
No hay que olvidar que tras la pasada crisis financiera los bancos acumularon un gran stock inmobiliario debido a las ejecuciones de hipotecas que se terminó convirtiendo en una suerte de lastre para el sector. No se quiere repetir esta situación.
Además, existe otra solución muy sencilla para que la carga de la hipoteca variable no se haga tan pesada: los clientes tienen la opción de cambiar su hipoteca de variable a fija, una modificación que siempre ha estado permitida, pero que favorece especialmente la ley hipotecaria, que entró en vigor en 2019.