Sabadell está orgulloso de la evolución que está mostrando durante los últimos trimestres y de la decisión que tomó hace ya más de un año de no continuar con las negociaciones para fusionarse con BBVA.
"El tiempo está dando la razón a una decisión que tomó el consejo de administración de seguir en solitario porque creían firmemente en el futuro de este banco", ha afirmado César González-Bueno, consejero delegado de Sabadell, durante la presentación de los resultados del primer trimestre del banco.
La entidad, de hecho, no se ve ya ni como entidad objetivo de una adquisición ni, al menos de momento, como una compradora. "En el horizonte del plan estratégico no vemos nada y más adelante no estamos mirando", ha añadido el banquero.
En su opinión, a Sabadell, que en el primer trimestre triplicó su beneficio, le está yendo bien, entre otras cosas porque sus gestores están "absolutamente centrados en el perímetro actual del banco, en hacer que las cosas funcionen cada día mejor".
"No nos estamos distrayendo con aventuras de ningún tipo, ni de venta ni de compra", ha afirmado González-Bueno, que ha añadido que tampoco se prevé que Sabadell se deshaga de su filial británica, TSB.
Futuro optimista
De cara al futuro, el banco mira con optimismo a un horizonte en el que ya se vislumbran subidas de los tipos de interés y del Euríbor, que ya está en positivo.
Según ha explicado Leopoldo Alvear, director financiero del banco, existe aún "cierta incertidumbre" sobre cuándo subirá los tipos el Banco Central Europeo (BCE), si bien "debido al alcance de la inflación es más posible que se haga antes que después".
"El mercado está apostando por una primera subida de la facilidad de depósitos en verano. La curva de implícitos incluso descuenta dos subidas en 2022. Si tuviera que apostar por algo sería por algo parecido a eso", ha añadido Alvear.
Y estas subidas, acompasadas con la mejora del Euríbor, van a engrosar los márgenes de todo el sector. No obstante, como ha apuntado el director financiero, el impacto positivo para la banca no se verá claramente hasta 2023 y este año será aún "reducido". Hay que recordar que las hipotecas se reprecian con unos dos meses de descalaje (las que se revisen en abril se adaptan a la referencia de febrero).
Créditos ICO
En este futuro también hay riesgos a la baja, como el vencimiento de las carencias de los créditos ICO, que se van a producir mayoritariamente en el segundo trimestre. La morosidad de esta cartera, por tanto, aún está por ver, si bien en Sabadell son optimistas.
Como ha explicado Alvear, las carencias que ya han ido venciendo han tenido un comportamiento "muy estable" y de cara al futuro reina la tranquilidad dado que el 92% de los créditos con carencia están calificados como normales, es decir, sin riesgo de que entren en mora. Y, de los restantes que sí son dudosos, la gran mayoría lo son por haberse refinanciado, no por haber impagado ya.