El PSOE quiere que los banqueros vinculen sus retribuciones variables a las condiciones de la plantilla, especialmente en el caso de las entidades financieras que están realizando fuertes ajustes de empleo, como CaixaBank y BBVA, que están aún en negociaciones, pero también Santander e Ibercaja, que las han terminado.
Más concretamente, el Grupo Parlamentario Socialista ha registrado una proposición no de ley para exigir a los bancos un compromiso para limitar el impacto negativo sobre la sociedad de los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) que están poniendo en marcha las entidades financieras.
Lo hace en un momento de gran tensión entre las entidades financieras y el Gobierno por la negociación de estos ERE, principalmente los de CaixaBank y BBVA, para los que aún quedan algunas semanas para alcanzar un acuerdo con los sindicatos.
"Paz social" rota
Los representantes de la plantilla, sin embargo, están bastante lejos de firmar cualquier acuerdo, una vez que se ha roto la "paz social" entre ambas partes después de que los bancos hayan planteado recortes de empleo que los sindicatos consideran que afectan a demasiados empleados y con unas condiciones muy diferentes a las de los ERE pasados.
Con esta propuesta, a la que ha accedido Invertia, el PSOE pretende que los bancos vinculen sus bonus, además de a las condiciones de la plantilla, a la calidad del servicio a sus clientes y que tomen medidas para evitar la exclusión financiera.
Asimismo, quieren que los bancos fomenten la flexibilidad interna para evitar que se destruyan miles de puestos de trabajo y se pueda recolocar a los empleados antes de tener que despedirlos, pero también ofrezcan formación a sus trabajadores.
También buscan que los trabajadores afectados por los ERE sean recolocados, algo a lo que, realmente, los bancos están obligados por el Estatuto de los Trabajadores al realizar ajustes de empleo para más de 50 trabajadores. Así lo hacen habitualmente y tanto CaixaBank como BBVA han anunciado ya las consultoras junto a las que los pondrán en marcha, Adecco y Randstad, respectivamente.