EVO Banco se muda. La entidad, ahora propiedad de Bankinter, ha decidido trasladar su única oficina física y su sede corporativa desde su actual localización, en la calle Serrano de Madrid, a otra ubicación muy cercana del Barrio Salamanca, en la que se estrenará en torno al 1 de mayo.
El banco digital, que desde hace año y medio opera únicamente con una sucursal física, se trasladará en las próximas semanas al número 84 de la calle Don Ramón de la Cruz, un edificio en pleno distrito financiero madrileño que pertenece al catálogo de la inmobiliaria Colonial.
La nueva sede se sitúa a unos quince minutos a pie de la anterior, de forma que el cambio de oficina no será demasiado brusco para los casi 200 trabajadores con los que cuenta la entidad en Madrid. La plantilla se trasladará a la nueva ubicación a lo largo de las próximas semanas, con el 1 de mayo como fecha orientativa para empezar a operar al completo en la nueva sede.
Los servicios centrales se ubicarán en la segunda planta del edificio, mientras que la única sucursal con la que cuenta EVO Banco, que también se trasladará, lo hará a la planta baja y se estrenará con un diseño renovado respecto a la anterior. Cada planta del edificio dispone de una superficie de unos 2.100 metros cuadrados y una altura de 3,4 metros.
Hasta ahora, los servicios centrales del banco operaban bajo un régimen de alquiler en el número 45 de la calle Serrano de Madrid, sede en la que inició su andadura. El edificio pertenece a un complejo propiedad de Abanca, entidad con la que EVO Banco comparte origen, que lo tiene alquilado en gran parte a otras empresas, como el despacho de abogados Larrauri y Martí, que opera en esta localización desde hace unos tres años.
Nueva etapa
En la nueva sede, EVO Banco también se alojará en alquiler, dado que Colonial es el propietario de este edificio, que hace esquina entre dos calles con un muro cortina acristalado con ventanales del suelo al techo.
El traslado responde a la intención del banco de emplazarse en un edificio más moderno, inteligente, que se ajuste mejor a su identidad digital y a la nueva etapa del banco, más centrada en el crecimiento y la innovación, según explican a Invertia fuentes de la entidad.
No en vano, EVO Banco está inmerso en una época de cambios tras la incorporación de Eduardo Ozaita como nuevo director general de la entidad el pasado enero y la salida de su antecesor, Enrique Tellado, que estuvo al frente del banco durante seis años tras ser director financiero en Novagalicia Banco.
La llegada de Ozaita ha ido acompañada de una remodelación de la cúpula de la entidad con la llegada de Beatriz de Mendoza como nueva directora financiera y de Juan Rosas como nuevo director de Negocio y Laboratorio de Clientes, ambos procedentes de Bankinter, como informó Invertia.
El banco vive estos cambios cerca de que se cumplan dos años desde que Bankinter cerró la compra del negocio bancario de EVO Banco y de su filial de consumo en Irlanda, Avantcard, por casi 66 millones de euros.
La entidad, que por el momento sigue operando bajo la marca de EVO Banco (Bankinter no ha dado señales de que quiera cambiarlo tras rechazar la idea inicial de fusionarlo con Coinc), nació hace nueve años tras la nacionalización de Novagalicia Banco siendo un banco digital y ya solamente cuenta con una oficina física, que complementa con la virtual.