El Banco de España ha querido lanzar este jueves una advertencia a los bancos para que sean conscientes de los riesgos que entraña el uso de tecnologías innovadoras, como las soluciones e infraestructuras en la nube, para todo tipo de procesos, incluso en aquellos críticos para el funcionamiento de las entidades.
Así, frente a ventajas como la escalabilidad, la flexibilidad o la facilidad de aprovisionamiento, entre los riesgos del uso de tecnologías innovadoras para todo se encuentran "la pérdida de control o, incluso, de conocimiento de los propios procesos", según ha explicado Margarita Delgado, subgobernadora del Banco de España, durante unas jornadas bancarias organizadas por El Economista.
"Es creciente el número de entidades que han redefinido su estrategia y están usando o se plantean hacer uso de la nube para todo tipo de procesos, incluso algunos que son críticos para la continuidad de su negocio. Los beneficios que promete esta tecnología (escalabilidad, flexibilidad o facilidad de aprovisionamiento) no deben hacernos olvidar los riesgos que entraña, como la pérdida de control, o incluso de conocimiento, de los propios procesos", ha apuntado.
Entre los riesgos del elevado uso de la innovación se encuentra también el hecho de que es difícil captar y retener a los profesionales especializados en ciertas tecnologías y en ocasiones los bancos se ven obligados a depender de terceros. Delgado también ha destacado el riesgo derivado del uso de soluciones inmaduras y el ciberriesgo, haciendo hincapié en que las campañas de phising se han incrementado durante la pandemia.
En definitiva, la número dos del supervisor ha instado a la banca a "mantener un control adecuado" sobre las decisiones de negocio que se tomen respecto a tecnologías innovadoras para que no se conviertan en "cajas negras" o "se desvíen del comportamiento deseado".
Esfuerzo digital
Con todo, Delgado ha puesto en valor el esfuerzo en digitalización realizado por los bancos durante el pasado año, en el que las infraestructuras de telecomunicaciones han estado sometidas "a una situación de estrés real" y los bancos "han tenido que implementar desarrollos específicos urgentes para dar cobertura a las ayudas gubernamentales, como las moratorias de los préstamos o la gestión de los créditos del ICO".
"En este escenario, la mayor parte de las entidades, al igual que otras muchas empresas de distintos sectores, se han visto forzadas a retrasar proyectos que, pese a ser prioritarios, precisaban la presencia física de empleados y proveedores", ha destacado la subgobernadora.