El cara a cara entre Santander y Andrea Orcel deberá esperar. El juzgado madrileño encargado del proceso judicial que enfrenta a ambas partes por el fichaje fallido del italiano como consejero delegado ha suspendido la vista oral que estaba prevista para este miércoles dado que el magistrado debe guardar cuarentena tras tener contacto estrecho con un positivo de Covid-19.
Concretamente, el órgano judicial ha informado de que un familiar directo con el que convive el juez ha dado positivo, por lo que el magistrado debe guardar la preceptiva cuarentena, lo que le impide mediar en el juicio previsto para este 10 de marzo. La nueva fecha no ha sido aún comunicada.
En la vista estaba prevista la comparecencia de Ana Botín, presidenta de Santander, para ofrecer testimonio sobre la marcha atrás del banco al fichaje de Andrea Orcel como consejero delegado que se produjo hace algo más de dos años.
Fichaje por UniCredit
Este proceso coincide en el tiempo con el nombramiento de Orcel como consejero delegado de UniCredit, que la junta de accionistas del banco italiano deberá ratificar el próximo 15 de abril.
Este conflicto judicial, a pesar de ser laboral, enfrentará así a los primeros ejecutivos de dos de los mayores bancos europeos, algo con lo que los supervisores no estarían muy cómodos. Con todo, el proceso estaba a punto de llegar a juicio sin un acuerdo entre ambos, algo para lo que este giro de los acontecimientos aporta más tiempo.
El enfrentamiento es fruto de la demanda que el italiano interpuso contra Santander en el verano de 2019 después de que unos meses antes el banco diera marcha atrás a su fichaje como consejero delegado (que había anunciado en el otoño anterior).