Lunes 6 de abril. El Gobierno activará ese día los 20.000 millones de euros de avales públicos para las empresas afectadas por el coronavirus y desde el sector bancario anticipan que, en cuestión de horas, el Instituto de Crédito Oficial (ICO) tendrá que poner en marcha la maquinaria para el segundo tramo de estas ayudas.
"Este primer tramo se va a agotar en horas, la avalancha de peticiones ha sido brutal", indican desde una entidad financiera nacional, donde reconocen que la mayoría de operaciones las coparán las renovaciones más que los créditos de nueva creación.
Es decir, el ICO tiene que ir pensando ya las condiciones que marcarán el segundo tramo de ayudas sin que todavía, este jueves por la mañana, las entidades conocieran todos los detalles de las del primero. Tan solo tenían acceso a algunos detalles de 'brocha gorda', como que no podrán acceder a esta financiación las empresas que figuren en los ficheros de la central de información de riesgos del Banco de España (CIRBE) a 31 de diciembre de 2019 o aquellas que estén en un procedimiento concursal a 17 de marzo de 2020.
En el Ministerio de Economía son conscientes de esta situación que las entidades ya han trasladado a la vicepresidenta económica, Nadia Calviño. Pero se resta importancia al hecho de que tan solo unas horas después de que se active la primera fase de los avales para financiar a las empresas se tenga que trabajar en activar una segunda línea, puesto que ya se contempla que se habiliten distintos tipos de avales para cubrir hasta 100.000 millones de euros con dinero público.
Las condiciones de ese segundo tramo podrían diferir frente a las contempladas para estos 20.000 millones de euros. Por ejemplo, en esta cuantía se incluyó un apartado destinado a las refinanciaciones, que no está claro que vaya a volver a contemplarse. También se habilitaron avales para cubrir el 80% de los créditos para las pymes y autónomos, mientras que para las empresas más grandes se dejó en el 70%, siguiendo la estela de lo anunciado por otros países, como Alemania.
El liberar dinero por tramos ofrece la ventaja de poder ir analizando cómo funcionan estas líneas para adaptar los recursos de la manera más eficiente y sin comprometer en exceso la deuda pública. Sin embargo, para el sector financiero, sería preferible conocer las condiciones de unas líneas que tienen que gestionar ellos.
Además, desde el punto de vista de los mercados financieros es preferible lanzar mensajes contundentes en lugar de ir detallando que a España se le agotan las líneas que va habilitando pues, al final, puede generar más nerviosismo entre los inversores seguir minuto a minuto las necesidades de liquidez de las empresas españolas en estos momentos de cierre económico.
Condiciones actuales
Fuentes bancarias consultadas explican que la idea es que el organismo reparta los 20.000 millones dependiendo de la cuota de mercado de cada entidad y no "a demanda" como estaba previsto en un principio. La institución pretende así limitar cualquier intento de los bancos de aprovechar el aval estatal para "captar" nuevos clientes de otras entidades.
"En las reuniones diarias que mantenemos con los gerentes del ICO nos han dejado claro que castigarán cualquier atisbo de competencia desleal en este sentido", aseguran desde un banco consultado.
"Hay que reconocer que este periodo de ‘precomercialización’ está siendo como un 'tonto el último'", reconocen desde otra entidad financiera nacional, insistiendo en que "la demanda ha desbordado las previsiones y, en cuanto se activen los avales, habrá que poner en marcha el segundo tramo".
En este sentido, los bancos consultados mandan un mensaje de calma a las empresas afectadas, recordando que aunque las líneas se agoten, seguirán ofreciendo liquidez a sus clientes y, cuando se activen los siguientes tramos, "acoplaremos esa financiación". Si se puede, claro, porque las condiciones pueden cambiar respecto a estos primeros avales, tal y como explicó Calviño tras el Consejo de Ministros del 24 de marzo.
Aún así, confían en no tener problemas en este sentido. Las entidades llevan días anticipándose con financiación de las líneas de garantía del ICO sin que estas estén aún activadas. Incluso Banco Santander ya incluye en su página web la posibilidad de solicitar estos créditos, indicando que “está pendiente que el Instituto de Crédito Oficial adopte las disposiciones necesarias para la puesta en marcha de forma efectiva de esta línea de avales”.
“Se revisa caso por caso, pasa por el control de riesgos de la entidad, pero por lo general no ha habido mayor problema porque son créditos que otorgamos a nuestros propios clientes, a los que conocemos perfectamente, tanto su situación personal como su riesgo”, defienden desde el sector.