De El Puerto de Santa María a la Bolsa de París: Nortem BioGroup pone en el mercado 2,5 millones de acciones
La empresa de tecnología alimentaria, especializada en suplementos funcionales, saldrá a cotizar con una valoración de 12,9 millones.
19 septiembre, 2023 03:10El próximo día 27, Nortem BioGroup saltará de El Puerto de Santa María a París. A su parqué, al menos. La empresa de tecnología alimentaria, especializada en el desarrollo de suplementos funcionales y otros productos destinados al bienestar humano, saldrá ese día a cotizar con una valoración de 12,9 millones de euros.
En total, pondrá a disposición del mercado 2.578.500 acciones, a cinco euros por acción. El toque de campana correrá a cargo del presidente ejecutivo y fundador de Nortem, José Luis Vázquez, que tiene claro que París se adecuaba mejor a la proyección de la empresa que la Bolsa de Madrid.
"El 90% de nuestros clientes están en Europa, nuestra vocación es europeísta y la Bolsa de París nos acerca a ello y nos orienta al mercado europeo", explica Vázquez a este periódico.
Es uno de los tres grandes motivos para cotizar en el segmento Access de Euronext París, asegura este empresario de origen gallego, ingeniero de Procesos Industriales de formación. Los otros son "marcar una reputación" y facilitar el encuentro con otras empresas líderes del sector. "Alianzas estratégicas, colaboraciones", resume.
La llegada a la Bolsa de París llega en un momento de expansión para Nortem, que se fundó en 2012 y comenzó a lanzar sus productos al mercado a finales de 2015. En 2016 facturaron en torno a 650.000 euros, y desde entonces su crecimiento ha sido meteórico: cerraron 2022 con casi 7 millones en ventas, realizadas sobre todo a través de Amazon.
Especias, cacao, edulcorantes, leche, semillas; todo ecológico. Perlas de BioSalt o ácido cítrico -el único ácido cítrico ecológico que se puede encontrar en el mercado, remarcan- son algunos de los productos estrella, junto a los complementos alimenticios que se encuentran entre la oferta de las cinco marcas de productos y materiales orgánicos que controla Nortem, que opera como holding.
Son Nortembío, NaturalPharma Laboratories, Luxury & Grace, Ecodescalk y LG Health iSystems. El catálogo de productos es bastante ecléctico. Incluye desde productos detox hasta descalcificadores ecológicos. También botellas ergonómicas.
"La misión consciente de la empresa es la de promover opciones alimentarias sostenibles, suplementos innovadores y probióticos inteligentes, y todo ello en consonancia con el compromiso de la marca con la protección del medio ambiente y la salud humana", remarcan.
Y hasta ahora han contado con el respaldo del público. En total, cuentan con medio millón de clientes, sobre todo europeos. La intención es expandirse también a los países de Norteamérica, tarea en la que esperan también ayude la salida a bolsa, que comenzó a gestarse hace dos años y ha contado en su ejecución con la asesoría de Solventis.
"En este primer ciclo nos hemos dedicado a desarrollar marca y producto con orientación a lo más saludable, y ahora comienza un periodo de inversiones de infraestructura y maquinaria", expone Vázquez.
Es un apartado al que dedican atención, junto a la innovación. Más del 30% de los ingresos de la compañía se destinan a la investigación y al desarrollo, que tiene lugar en su totalidad en El Puerto de Santa María. Allí se encuentran sus 36 empleados, el 20% de los cuales se centra en el desarrollo de nuevos procesos y productos.
En muchas ocasiones esa investigación ha arrancado mirando al propio entorno. "Nuestro comienzo fue valorizar lo que teníamos alrededor", apunta. Fue ese el origen de su apuesta por el ácido cítrico, un ácido orgánico natural que se utiliza como aditivo alimentario, así como para regular la acidez y actuar como conservante natural. También en la producción de productos farmacéuticos y cosméticos.
"De ácido cítrico solo hay dos fábricas en Europa y muy pocas en el mundo. Entonces nosotros tenemos que innovar en la forma de fabricar", subraya. Mientras otros usan el maíz transgénico, ellos usan residuo de las azucareras que ponen en valor.