Miguel Garrido de la Cierva ha vuelto a ser elegido como presidente de la Confederación Empresarial de Madrid-CEIM (CEOE) en la Asamblea General que se ha clausurado este lunes. En esta ha cargado duramente contra la "campaña de hostilidad" del Gobierno nacional contra las empresas.
Garrido, que estará al frente de la patronal de los empresarios de Madrid, ha destacado que su anterior mandato ha sido "complicado" ante la incertidumbre del Covid-19 y los efectos de la Guerra de Ucrania, según recoge Europa Press.
A esta situación, ha sido agravada por el Gobierno central a quien Garrido ha acusado, entre otros, de implementar una "campaña de hostilidad" hacia los empresarios a través de la "criminalización" de los beneficios empresariales.
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En su discurso ha criticado, uno por uno, a los ministros que tienen responsabilidades económicas, desde la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño; hasta la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz; pasando por María Jesús Montero (Hacienda) y José Luis Escrivá (Seguridad Social).
En la primera en la que ha fijado la mirada ha sido a Calviño, a quien ha reconocido que acogieron con "enorme esperanza" tras su trabajo en Bruselas, pero a quien ha afeado que "ha demostrado que ha primado el relato a los hechos". Ha puesto como ejemplo de ello que Espala solo haya recuperado el PIB prepandemia este trimestre o que asegurase que la inflación iba a ser algo estructural.
Sobre Escrivá, ha aseverado que ha "vuelto a agravar" al situación de la sostenibilidad de las pensiones y le ha acusado de implementar "incrementos brutales" en la presión a empresarios y autónomos, mientras que a María Jesús Montero la ha responsabilizado de dedicarse a un "gasto desbocado" y cargar a las arcas públicas medidas electoralistas a la vez que incrementaba la presión fiscal.
En quien más se ha detenido es en la ministra de Trabajo y líder de Sumar, sobre quien ha afirmado que ha llegado un punto en el que no "se entiende" su retórica.
Estatuto del Becario
En este punto, ha criticado el Estatuto del Becario y que Díaz hable de diálogo social cuando se ha "marginado" a las empresas y al sector educativo en la toma de esta decisión. Entiende que ese ha intentado "forzar una regulación" para evitar un fraude en contratos de prácticas que podría haber perseguido desde su Ministerio sin cambiar una norma, que va a "dificultar enormemente el acceso de los jóvenes al mundo profesional".
Sobre este Ministerio, ha destacado el papel de la patronal empresarial para que en la reforma laboral se mantuvieran algunos de los "avances" que se consiguieron en la promovida por Fátima Báñez. Al respecto de los resultados de la misma, ha criticado que Yolanda Díaz utilice una "interpretación sesgada" para darse "autobombo".
Ha asegurado que aunque ellos como patronal de empresarios tienen que mantenerse "al margen" de la política de cara al 23 de julio, ha asegurado que sí que pueden "comentar las políticas" y analizarlas. Es por ello que ha llamado a conseguir un Gobierno "responsable, respetuoso y eficiente", que no se esté "apoyado en minorías radicales que ponen en riesgo nuestro prestigio".
Garrido ha recordado con motivo del 45 aniversario de CEIM las palabras que pronunció José Antonio Segurado, presidente fundador de CEIM en 1978 y que "pueden retomarse a día de hoy", ya que hacían referencia a afrontar las dificultades con esperanza: "La salida de la crisis, no va a ser fácil, y sus costos, a veces, serán altos", decía José Antonio Segurado, "pero todos, trabajadores, directivos y empresarios debemos afrontarlos con el máximo de serenidad y el mínimo de tremendismo".
Garamendi
También ha tomado la palabra Antonio Garamendi, quien ha dedicado gran parte de su intervención a destacar la importancia del trabajo de CEIM durante estos nueve lustros y se ha reivindicado como parte de una generación que ha sido "hija de la democracia y no nieta de la guerra".
Primero ha loado el trabajo de la Corona, que "impulsó la democracia" en la figura del rey emérito Juan Carlos I, que junto al "marco constitucional" es el "elemento fundamental" sobre el que se sustenta el Estado.
Ha defendido que desde las patronales empresariales se busca "lo que se cree que es mejor para el país" y que por ello entiende que es imprescindible el diálogo social. "Echamos en falta la lealtad institucional", ha lanzado Garamendi, quien ha reivindicado a los agentes sociales como ejemplo de "lo que hay que hacer", que es "sentarse y no volver a la crispación para poder entenderse".
Por último, ha deslizado que "muchos tienen mucha envidia de la gestión que se hace en Madrid, porque haciéndola así en todos lados, el país probablemente iría mejor".