La decisión de la Comisión Europa sobre la fusión de Orange y MásMóvil en España llegará más tarde de lo que se había previsto inicialmente. Bruselas ha acordado con las operadoras retrasar dos semanas, hasta el 4 de septiembre, la fecha tope que se había fijado para decidir si aprueba la operación, con o sin condiciones, o la veta.
Fuentes de la Comisión Europea han confirmado a EL ESPAÑOL-Invertia que la resolución de la fase 2 de la investigación de la fusión se ha ampliado diez días más "de acuerdo con las partes notificantes", lo que permite a Bruselas tener más tiempo para revisar toda la información disponible antes de tomar una decisión.
Se cumple así con lo recogido en el artículo 10(3) de la regulación europea de fusiones, que permite a las partes solicitar una ampliación de la fecha límite de la fase 2 de hasta 20 días laborables. Este tipo de prórrogas son habituales en los análisis de proceso de operaciones de concentración.
El pasado 4 de abril Bruselas abrió una investigación en profundidad de la operación de concentración de Orange y MásMóvil, con lo que arrancó un plazo de 90 días hábiles para tomar una decisión (hasta el 21 de agosto de 2023), que ahora se prorroga dos semanas.
Asimismo, con el anuncio de la prórroga se informa también de que la petición que realizó la Comisión Nacional de Mercados y de Competencia (CNMC) para quedarse con el caso está todavía pendiente de resolver. En este caso, no existe un plazo legal máximo para responder a dicha petición, lo que incluso podría tener lugar al mismo tiempo quen se toma la decisión final.
Problemas de competencia
La Comisión justificó su decisión de abrir una investigación en profundidad de la operación en que la fusión plantea problemas de competencia, en particular en los servicios de banda ancha móvil y fija y en la oferta de paquetes de servicios múltiples en España.
Entonces detalló que la fusión disminuiría de cuatro a tres el número de operadores de red en España, "eliminando así un competidor innovador y significativo". "Eso podría dar lugar a precios más elevados y a una menor calidad de los servicios de telecomunicaciones para los clientes", informó el Ejecutivo comunitario.
Logos de Orange y MásMóvil en sus respectivas sedes en Madrid.
"MásMóvil ha sido un competidor exitoso de Orange y otros operadores en los últimos años. Esta es la razón por la que abrimos una investigación exhaustiva sobre la concentración entre MásMóvil y Orange", incidió la vicepresidenta de la Comisión y responsable de Competencia, la liberal danesa Margrethe Vestager.
El análisis preliminar de Bruselas indica que Orange y MásMóvil son "competidores cercanos" en tres mercados de prestación minorista en España: servicios de telecomunicaciones móviles; servicios de acceso de banda ancha fija; y paquetes de servicios múltiples, por ejemplo, servicios convergentes de telefonía móvil y fija.
El Ejecutivo comunitario recuerda que hay un total de cuatro operadores de redes de telefonía móvil presentes en España (Telefónica, Orange, Vodafone y MásMóvil) y que los dos implicados en la fusión ocupan la segunda y cuarta posición, respectivamente. También hay varios operadores de redes virtuales de telefonía móvil y fija que utilizan la infraestructura de los operadores de red para ofrecer sus servicios.
Como resultado de la operación, Orange y MásMóvil "tendrían la capacidad y el incentivo para restringir el acceso de los operadores virtuales a la red móvil al por mayor y a los servicios mayoristas de acceso a la red fija".
"Esto podría reducir la capacidad de estos operadores para competir, lo que a su vez puede traducirse en precios más elevados y una menor calidad de los servicios para los clientes finales en España", apunta Bruselas.