El Gobierno ha dado un paso más en su lucha contra el juego online. El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes un real decreto que endurece aún más el acceso a las plataformas, y que "obliga a los operadores a crear entornos de juego más seguros".
Un cambio normativo que se basa en un "cambio de paradigma" en la concepción del juego. Se pasa "de un enfoque individualista centrado en que la persona jugadora es la única responsable de su juego a uno nuevo, de carácter proteccionista, que hace responsable de los riesgos de los juegos de azar y apuestas a las empresas".
El objetivo ahora es proteger a los jugadores vulnerables, tratando de minimizar los comportamientos de juego de riesgo o intensivo y que estos puedan derivar en conductas problemáticas o patológicas.
Jugadores vulnerables
A partir de ahora se considerará 'vulnerable' a los menores de entre 18 y 25 años; pero también a quienes acumulen pérdidas netas iguales o mayores a 600 euros en un plazo de tres semanas seguidas. La cifra se reduce a 200 euros en el caso de los jugadores entre 18 y 25.
También formarán parte de este colectivo todas aquellas personas que hayan decidido 'autoexcluirse' solicitando la restricción en el acceso a su cuenta de juego y quienes se hayan inscrito en el Registro General de Interdicciones de Acceso al Juego (autoprohibidos).
Balance de pérdidas
Los operadores de juego estarán obligados a avisar a los jugadores vulnerables o a aquellos que puedan tener una conducta de riesgo de su situación. También tendrán que enviar un resumen mensual de la actividad de juegos, en el que se incluya el número de accesos a la plataforma, los medios de pago, el balance de pérdidas y ganancias, entre otras. Para el resto de usuarios estos extractos serán voluntarios.
Ojo a las tarjetas
Los jugadores en situación de riesgo no podrán utilizar tarjetas de crédito mientras mantengan esa dinámica (sólo podrán utilizar medios de pago nominativos y de su titularidad).
Contacto en 72 horas
Cuando una empresa detecte que un usuario es de riesgo o puede caer en él, estará obligada a contactar con él. El objetivo es lograr una respuesta en un máximo de 72 horas. Si no lo hay, se suspenderá su cuenta.
Promociones
Los vulnerables estarán excluidos de las actividades de promoción o de las listas de clientes privilegiados. Esto significa que no se les podrán ofrecer condiciones ventajosas para fomentar su nivel de juego.
La ley también establece que para los usuarios de entre 18 y 25 años no se podrán enviar actividades promocionales cuyo objeto sea ajeno a la actividad de la plataforma de juego. Es decir, no se les podrá invitar a partidos u otros espectáculos. Tampoco podrán ser incluidos en programas vip de fidelización.
Servicio de atención
Los operadores tendrán que poner a disposición de sus clientes un teléfono de atención al jugador. El objetivo es que aquellas personas que crean que empiezan a tener comportamientos de riesgo puedan llamar para ver cómo abordar su situación.
Adiós al 'casi acertaste'
A diferencia de lo que ocurre en la actualidad, tampoco podrán emitirse mensajes como “casi acertaste” o “estuviste cerca” para propiciar una nueva apuesta o juego al terminar una partida.
Sanciones
Para las infracciones graves las multas ascienden hasta un millón de euros y pueden acarrear la suspensión de la licencia de juego durante seis meses. En el caso de las muy graves, las sanciones se elevan hasta los 50 millones de euros y pueden llevar aparejada la pérdida de la licencia de juego.