El guión esperado para las elecciones de la CEOE, que se han celebrado este miércoles en Madrid, se ha cumplido. Antonio Garamendi ha sido reelegido presidente de la patronal para los próximos cuatro años con el 83% de los votos.
El empresario vasco ha derrotado a su contrincante, Virginia Guinda, vicepresidenta de Foment del Treball, en unas elecciones en las que ha obtenido el 13,5% de los votos.
En total, han votado 643 vocales de la CEOE. De ellos, 534 votos han ido a parar a Garamendi, 87 a Guinda, 14 han sido en blanco (que se han contabilizado a favor de Garamendi) y se han declarado 8 votos nulos.
Tras ser reconocido como ganador por la junta electoral, Garamendi ha dado un breve discurso en el que ha agradecido los apoyos y ha recordado algunos de los hitos de los últimos años de su mandato, como "la entrada de los autónomos" y el "récord de acuerdos en el Diálogo Social que permite la paz social". De hecho, ha calificado el diálogo social como "la mejor infraestructura del país".
Con todo, también ha tenido palabras duras para el Gobierno. Ha lamentado que "estamos viviendo leyes e impuestos a la carta que generan inestabilidad regulatoria. Estamos viendo también que no hay calidad en las normas, de tal manera que nos encontramos con situaciones totalmente rocambolescas".
En declaraciones a los medios de comunicación ha recordado que, en cualquier caso, "el canal con el Gobierno siempre ha estado abierto y seguirá estándolo. Pero eso no significa que tengamos que hacer lo que nos digan".
En este sentido, ha insistido en que "los empresarios son la solución, no el problema" y ha afirmado que su postura sobre los asuntos que se están discutiendo con el Gobierno, como la reforma de las pensiones, no va a cambiar (aunque ha confirmado que no se ha recibido ninguna propuesta concreta).
Futuro de Foment
Por otro lado, ha hecho un guiñó a las asociaciones que forman parte de la CEOE. "Sois fundamentales los territorios y los sectores. Tenemos que mirar de abajo arriba. Todos son importantes", ha asegurado.
"España es la otra medida de la CEOE", ha afirmado. "Somos hijos de la Constitución, no nietos de las guerras", ha asegurado.
Ha celebrado la elevada participación en los comicios y considerado que el resultado "demuestra la unidad en esta casa". Consultado sobre si se plantea rebajar el peso de Foment del Treball (que promovió la candidatura de Guinda) en el comité ejecutivo que se forme de cara a la próxima legislatura, ha precisado que "no sobra nadie. Tengo un gran respeto institucional. No está en mi mente que Foment se quede fuera".
Guinda presentó su candidatura como una suerte de oposición a la gestión del propio Garamendi después de que el presidente de Faconauto, Gerardo Pérez, descartara presentar una alternativa. La catalana, durante su campaña, reclamó una CEOE "más participativa y colegiada", en la que las asociaciones y órganos que la integran tengan mayor capacidad de influencia y decisión.
Sin embargo, es la opción de Garamendi la que se ha impuesto en las elecciones. De esta manera, el vasco seguirá liderando la CEOE tras una legislatura marcada por la entrada del Gobierno de coalición, la irrupción de la pandemia y de la crisis económica.
A lo largo de este tiempo, la patronal ha alcanzado 14 acuerdos con los sindicatos y el Gobierno, entre ellos la reforma laboral, la Ley Rider o la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) de 2020.
Con todo, la cercanía de las elecciones ha enfriado esta evolución pactista. De hecho, un pacto de subidas salariales con los sindicatos en marco del Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) sigue pendiente y el Gobierno ha esperado a que los comicios se celebrasen para cerrar cuestiones como el estatuto del becario o la reforma de las pensiones.