En los últimos años, los paneles solares se han abierto paso en el terreno agrícola, por lo que están cada vez más presentes en el paisaje español. Además de estar diseñados para generar energía renovable a partir de la radiación solar, una práctica esencial para el cuidado del medioambiente y la descarbonización, se han convertido también en una solución para proteger los cultivos, dando sombra o dejando pasar el sol en función de sus necesidades. 

Estas nuevas utilidades que ayudan a los agricultores en sus tareas se muestran en el proyecto Winesolar de Iberdrola, con el que se ha instalado la primera planta agrovoltaica inteligente en España, concretamente en un viñedo, pensada para mejorar la calidad de la uva y proteger las viñas con las sombras de los paneles. Esto es posible gracias a los seguidores inteligentes, unos dispositivos específicos para mover los paneles solares y potenciar la producción de electricidad, que hay instalados en las placas y que están controlados por un algoritmo de inteligencia artificial capaz de determinar cuál es la posición óptima de los paneles colocados sobre las vides. 

Además de estos seguidores, en este nuevo concepto de instalaciones se coloca en el terreno unos sensores que recogen información con la que poder determinar cuál es el mejor grado de inclinación de las placas. A la vez, registran datos que también pueden ser beneficiosos para el cuidado de la vid, como el nivel de humedad en la tierra, las condiciones de viento o el grosor del tronco del cultivo, entre otros. 

Principales beneficios de Winesolar

El principal beneficio de este proyecto es conseguir que la maduración de las vides sea más acompasada y lenta, evitando que las temperaturas extremas afecten a su crecimiento, ya que estos paneles solares servirán para protegerlas.

Dado que estamos hablando de energía agrovoltaica, resulta evidente que otra de sus principales ventajas es el uso de la energía solar que producen sus placas, lo que reduce la emisión de gases nocivos, avanza en la descarbonización del sector, disminuye los costes energéticos y sirve como vía de autoconsumo en las zonas en las que están instaladas. Por ello, Winesolar se convierte en un ejemplo de la positiva convivencia de las energías renovables con el mundo rural y en una oportunidad para generar un impacto positivo en el entorno gracias a la generación de electricidad.

Empresas unidas por un objetivo común

El proyecto nace de la colaboración de la energética y otras tres empresas españolas: Techedge, organización dedicada a soluciones tecnológicas avanzadas; PVH, compañía especializada en la fabricación y montaje de seguidores solares; y las bodegas Gonzalez Byass y Grupo Emperador, cuyos viñedos es donde están instalados los paneles solares. Este proyecto tiene una capacidad de 40 kW y se destina íntegramente al consumo de estas bodegas. 

A lo largo del próximo año, Iberdrola monitorizará los resultados de este proyecto llevado a cabo a través del Programa internacional de star-ups PERSEO, que impulsa la energética y con el que pretende invertir en proyectos pilotos y dar acceso a las tecnologías del futuro. La eléctrica tiene como objetivo ir perfeccionando esta innovadora actividad para replicarla en otras explotaciones vitícolas en España, donde concentramos el 13% de los viñedos del mundo. 

Iberdrola como promotora de energía solar fotovoltaica

Consolidada como una de las empresas energéticas más importantes y eficientes a la hora de luchar contra el cambio climático, Iberdrola sigue apostando por el uso de la energía solar fotovoltaica como fuente renovable, lo cual le permitirá sumar en los próximos meses 1.500 nuevos megavatios (MW) solares. 

Precisamente, el año pasado la empresa cerró el primer semestre del año con más de 2.200 MW fotovoltaicos instalados en España, lo que suponía 800 MW más que el mismo periodo durante el año anterior. Esto equivale a un incremento del 55%. 

Además, el avance en este sector ha permitido a Iberdrola incrementar un 125% su producción solar en España a cierre de junio de 2022. Estos resultados de las actividades de la eléctrica confirman su firme compromiso con el uso del sol como fuente de energía renovable, inagotable y no contaminante. Un ejemplo de lucha contra el cambio climático y el cuidado de los terrenos agrícolas.