El escenario de tipos bajos es un arma de doble filo para entidades como Arquia Banca, que en los últimos años ha apostado por crecer en el asesoramiento financiero independiente con la compra de Profim.
Al igual que sus competidores, el banco, que nació como cooperativa de crédito para dar servicio a los arquitectos, padece en términos de rentabilidad la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE). Sin embargo, para su negocio de asesoramiento, la abundante liquidez y la necesidad que tienen los ahorradores de buscar productos alternativos a los depósitos ha sido una palanca para impulsar la apuesta que hizo en 2016 al comprar una participación mayoritaria en la citada EAFI (Empresas de Asesoramiento Financiero). Una apuesta que consolidó en 2018 al hacerse con el 100% de Profim para integrarla en el banco.
“Profim es nuestra banca privada, pero mantiene el modelo de asesoramiento independiente basado en recomendar productos que no tengan nada que ver con el banco. Los crecimientos de nuestro negocio han sido muy significativos en 2017 y 2018 si los comparamos con el sector. En 2018, el sector decreció y nosotros crecimos un 5%. En buena parte fue gracias a la integración de Profim y su modelo”, asegura el director general de Arquia, Javier Ventura, en una entrevista con EL ESPAÑOL.
La antigua Caja de Arquitectos se transformó definitivamente en banco el pasado marzo y cuenta ya con 150.000 clientes gracias también a la compra de Caja Abogados que culminó en enero de 2018.
Gracias a estas inversiones, la entidad ha experimentado en los últimos cuatro años un aumento medio del 7,5% en número de clientes. Y esa estrategia de crecimiento inorgánico va a seguir marcando su hoja de ruta en el nuevo plan estratégico que elaborarán a la vuelta de verano, cuando venza el que diseñaron para el periodo 2016-2019.
“Apostamos por el crecimiento inorgánico, estamos activos en evaluar oportunidades. Nuestro capital es elevado. A pesar de las compras, terminamos con un ratio del 16,5% en el primer trimestre. Es un ratio holgado que nos permite estar atentos a adquisiciones”, reconoce Ventura. “Estamos cómodos en estos parámetros porque no podemos bajar el servicio que damos a nuestros clientes”, apostilla.
Sin embargo, eso es compatible con jugar un papel activo en la consolidación del sector de la gestión de activos. “Ahora tenemos la integración de una EAFI. Parece algo que es simple, pero no lo ha sido porque hemos tenido que respetar su modelo. Después de integrar Profim, tenemos un camino marcado que nos puede ayudar si queremos crecer en algún momento. Y ahora, con MiFID II, hay muchas EAFIS que se están convirtiendo en gestoras o sociedades de valores porque con los nuevos costes no pueden ser competitivos y tienen que buscar alianzas. Así que ahí estamos, muy atentos al mercado porque el modelo ha sido de éxito”, asegura el directivo.
Nuevo Plan Estratégico
Todo apunta a que el nuevo plan estratégico del banco en el que se incorporarán esos planes será a tres años, puesto que la inestabilidad de los mercados, la política monetaria y la economía complica hacer planes a más largo plazo.
“A la vuelta del verano abriremos una reflexión interna para presentar el nuevo plan estratégico. Probablemente lo haremos a tres años porque parece que a cuarto años las cosas pueden cambiar demasiado. En 2016, por muy pesimista que se fuera -y en nuestro caso, éramos pesimistas- no era posible imaginar los tipos en 2019 en negativo”, señala el director general de Arquia Banca.
Los focos de esa nueva estrategia, avanza el ejecutivo, van a ser los mismos: crecer internamente con sus clientes y combinar ese crecimiento con el inorgánico si hay oportunidades en el sector. Lo harán a través de las 39 oficinas que tienen repartidas por todo España y con su sede social en Madrid, algo a lo que restan importancia desde la entidad -que antes del 1-O tenía esa sede en Cataluña- por la fuerte presencia que tienen en distintas comunidades autónomas
“Podemos escalar poco a poco y la gestión de activos y el asesoramiento va a ser una línea muy clara, también por el desarrollo de nuevos servicios para profesionales y directivos”, puntualiza.
En cuanto a su estrategia internacional, cualquier movimiento se hará con "prudencia". El banco lleva tiempo analizando cómo entrar en el mercado luso, lo que podría ser con alguna alianza bien dentro del negocio de seguros o de algún otro servicio complementario.
Precisamente, la banca seguros es un pilar de su estrategia, puesto que buena parte de sus clientes, en especial los arquitectos, son profesionales con una actividad que necesariamente tiene que estar asegurada.
"Ya tenemos acuerdos con Mapfre para distribuir seguros no vida, pero pensamos que tenemos mucho recorrido porque nuestro cliente es un cliente que habitualmente necesita seguros”, explica Ventura.
Fondos de inversión
El grupo Arquia ha comercializado un volumen de fondos de más de 450 millones de euros (dato de cierre de 2018), lo que representa un incremento del 218% en los últimos cuatro años. De esa cantidad, un 30% procede del incremento de volumen de fondos gestionados por su gestora, que ya cuenta con un patrimonio de 185 millones de euros.
Ese volumen podría aumentar cuando cierre 2019. "El mercado este año está ayudando, estamos creciendo en fondos. Con las nuevas carteras de Profim tenemos más fondos asesorados internacionales que de nuestra propia gestora. Esto es algo que no debe ocurrir en ningún banco en España", presume el director general.
Pese a la integración de Profim, la entidad se ha preocupado de no perder la esencia de la EAFI. "Separamos mucho nuestra gestora de lo que es el asesoramiento del banco", reconoce Ventura.
Y en cuanto a su negocio de banca privada, aunque lo habitual es que esté ligado a grandes patrimonios, en el caso del grupo Arquia se abre la puerta a todo tipo de clientes "por la lógica del modelo de negocio" muy vinculado a colectivos colegiados y a directivos que trabajan por cuenta ajena.
“Nuestro cliente es profesional, de renta media alta, que tiene poco tiempo para la planificación. Tenemos una cuota importante de autónomos y despachos de profesionales”. Por ello, aunque no tienen “segmentación a partir del volumen”, la entidad considera que para sacar valor a una cartera de fondos asesorada, la diferencia se empieza a notar a partir de un patrimonio de 100.000 euros.
Para esos clientes, la entidad ha puesto en marcha planes de Educación Financiera a través de los Colegios profesionales.
Además, ha incorporado la plataforma de Inversis y cuenta con una nueva base tecnológica con la que espera afrontar en mejores condiciones la feroz competencia que padece el sector financiero no sólo por las entidades, también por las ‘fintech’ y los gigantes tecnológicos, como Alipay, que ya ofrecen fondos de inversión a sus clientes.