La batalla de Vodafone para superar la guerra del fútbol: 25.000 altas de internet en 2019
La operadora intenta levantar cabeza con un nuevo concepto de televisión, en principio, sin nada de fútbol.
7 mayo, 2019 01:44Noticias relacionadas
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Vodafone sigue con su larga travesía en el desierto para intentar recomponerse tras la guerra del fútbol, que le llevó a perder 120.000 líneas fijas en 2018. Los datos de portabilidad recopilados por este periódico indican que durante los cuatro primeros meses del año la compañía logró mejorar en poco más de 25.000 altas netas sus líneas fijas, las que tradicionalmente reflejan el crecimiento en paquetes convergentes y televisión.
Es verdad que en el segmento móvil sigue con caídas -al igual que los grandes operadores- con 100.000 líneas de retroceso, lo que se explica por la caída que el sector tradicional a manos del bajo coste. Por eso, el crecimiento en fijo es interpretado en el sector como un reflejo del buen comportamiento de la estrategia de la compañía de potenciar sus convergentes y su televisión, apostando por series y cine para sustituir el fútbol.
Los datos de portabilidad del año 2018 reflejaron que Vodafone perdió 120.000 líneas de fijo y 555.000 de móvil. Del mismo modo, las cifras oficiales de la operadora indican que los clientes de banda ancha fija (la del hogar) se redujeron en 156.000 hasta los 3,2 millones, mientras que que los de televisión bajaron en 90.000 hasta los 1,28 millones al cerrar diciembre.
Estamos hablando de un año muy duro para la operadora. Después de un primer semestre perdiendo líneas por las ofertas de bajo coste, la compañía decidió no ofrecer la Champions League y El Partidazo en verano, lo que desató una guerra comercial que se saldó con mayores gastos en promoción y un retroceso mayor del esperado por los propios directivos de la operadora, tanto en clientes como en ingresos. Durante los nueve primeros meses del año ingresó 1.055 millones de euros, un 7,3% menos.
Nueva oferta de televisión
En enero de este año, la operadora anunció un ERE de 1.200 personas que la semana pasada se cerró en 916 salidas. En estos cuatro meses la compañía ha reestructurado su organigrama y ha puesto en marcha una nueva estrategia centrándose en el bajo coste sin renunciar a los clientes de alto valor. En abril lanzó dos nuevas propuestas comerciales: las tarifas planas de datos móviles y micropaquetes de televisión a la carta.
Los datos de la operadora que se harán públicos este 14 de mayo, al presentar sus resultados anuales, probablemente reflejen un crecimiento los clientes de televisión respecto del trimestre anterior, en la línea de la mejora de más de 25.000 líneas fijas en los primeros cuatro meses del año.
En la operadora han destacado públicamente su apuesta por la televisión y para ello llevan reforzando su oferta de contenidos durante los dos últimos años. Este trimestre renovaron su acuerdo en exclusiva con HBO, mantienen Netflix, Filmin, Movistar Series, Movistar Cine, preparan la integración de Amazon Prime Video y han fichado los contenidos de Starz.
Nueva vida sin fútbol
El objetivo es tenerlo todo y ofrecer a sus clientes lo que se ajuste a sus necesidades. Para eso han remodelado su oferta de televisión con cinco paquetes y sin la necesidad de contratar una oferta básica de contenidos. Los cambios han entrado el 14 de abril y, de momento, se saldan con una mejora mensual de 10.600 líneas, la mejor desde enero.
A diferencia de las tarifas planas de datos móviles, que en sus primeros quince días se han saldado con una caída mensual de 35.000 líneas, los primeros datos de la oferta de televisión parecen dar frutos en el momento en que todo el sector encara su último trimestre antes de empiece la nueva guerra del fútbol, en la que de momento Vodafone dice que no entrará.
En julio, Movistar debe publicar su nueva oferta mayorista y desde Vodafone han indicado que si no se cambia radicalmente el sistema de comercialización no participarán en el fútbol. Una verdadera prueba de fuego para las portabilidades fijas de la compañía, ya que por primera vez en más de cuatro años no emitirá ningún partido de fútbol: ni Liga, ni Partidazo, ni Champions League.