Los ingresos de la compañía se han reducido un 3,6% entre enero y marzo, hasta los 1.023 millones, debido al impacto de los tipos de cambio, especialmente el euro-dólar, según ha informado hoy Grifols, que destaca, no obstante, el crecimiento orgánico que han experimentado todas las divisiones del grupo en todas las regiones geográficas en las que opera.

El ebitda (beneficio bruto de explotación), por su parte, se sitúa en 297,4 millones, un 2,8% menos que en el mismo periodo del año anterior y representa un margen de más del 29% sobre ingresos, mientras que el ebit (resultado neto de explotación) está en 244,6 millones, con un descenso del 3,2%.

Los ingresos de la división Bioscience, relacionada con la fabricación y comercialización de medicamentos derivados del plasma, alcanzaron los 807,5 millones de euros, un 5,4% menos, teniendo en cuenta el impacto del tipo de cambio, aunque, según la empresa, la demanda global de las principales proteínas plasmáticas es sólida y mantiene la tendencia de crecimiento.

La división Diagnostic, dedicada a la fabricación y desarrollo de aparatos, instrumentación y reactivos para la medicina transfusional, ha registrado 164,9 millones de ingresos, un 5,8% menos, también por el impacto de las divisas.

Las ventas en la división Hospital ascendieron hasta los 27,3 millones de euros, un 14,3 %, impulsadas por la línea de Pharmatech, reforzada con la adquisición de MedKeeper y la línea de soluciones intravenosas en Estados Unidos.

La división Bio Supplies dobló sus ingresos hasta los 26,2 millones, con un crecimiento del 81,6%.

Las inversiones netas en I+D+i alcanzaron los 73,5 millones, un 17,4% más, incluyendo los recursos destinados a proyectos propios y externos.

La compañía ha destacado que este primer trimestre de 2018 se ha caracterizado por un mayor esfuerzo para incrementar el volumen de plasma, tanto de forma orgánica como con adquisiciones para dar respuesta a la creciente demanda del mercado.

Esto incluyó la incorporación en 2017 de 19 centros de plasma a la red de Estados Unidos y un total de 40 desde principios de 2015, año en el que empezó este plan de expansión de centros.

En el primer trimestre de 2018, la compañía ha intensificado su estrategia con la compra de Haema en Alemania, compañía que cuenta con 35 centros y otros tres en construcción y es la mayor plataforma de centros de plasma de Europa, transacción que está sujeta a la aprobación de las autoridades de defensa de la competencia alemana.

A finales del primer trimestre de 2018, la deuda financiera neta se ha situado en 5.155,3 millones de euros y la ratio de deuda financiera neta sobre Ebitda en 4,03 veces.

A 31 de marzo, las posiciones de efectivo de Grifols superaron los 845 millones de euros y contaba con líneas de financiación no dispuestas por importe de 372 millones, lo que sitúan la posición de liquidez de la compañía por encima de 1.200 millones de euros.