El resultado negativo de GAM se debe a una serie de impactos que no generan salida de caja, como los 6,3 millones de euros de gasto en intereses financieros en deuda convertible (Tramo C) que se devengan de la deuda total a largo plazo, que, a finales de 2017, ascendía a 70,7 millones de euros.
El otro gran impacto provino de las diferencias de cambio por créditos fiscales con matriz denominados en euros, que tampoco suponen salida de caja, y supusieron un gasto de 1,8 millones de euros, cuando en 2016 el cambio de divisa sumó 2,4 millones al resultado neto.
UN 11% MÁS DE FACTURACIÓN
Con esta serie de ajustes, la compañía tendría en el ejercicio un resultado de negocio positivo de 371.000 euros, 7,8 millones más que en 2016, por una mejora en la facturación del 11%, que fue de 116 millones de euros.
Este incremento en las ventas se explica por la mejora en precios, en el alquiler de maquinaria y en el aumento de la rama servicios, unido a una reducida inversión en activos.
El crecimiento en las ventas radicadas en España, Portugal y Marruecos, que suponen un 79% de la facturación de la empresa, fue del 14%, mientras que en Arabia Saudí, que apenas representan el 2% del negocio, descendieron un 15%, por su bajo nivel de actividad.
SU EBITDA CRECIÓ UN 20%
El resultado bruto de explotación (Ebitda) también aumentó un 20%, hasta los 31 millones de euros, debido a la mejora de los márgenes operativos por la implantación de medidas de eficiencia y control de costes fijos y de las ventas.
De cara a 2018, GAM señaló que el desarrollo de servicios (subasta electrónica), la inversión y desarrollo del negocio de drones y el cierre de una alianza estratégica con Hyster, una empresa americana de carretillas, permitirán a la compañía desarrollar su negocio de distribución.