El beneficio neto ajustado de Applus se situó en 40,2 millones de euros entre enero y junio, ligeramente por debajo de los 41,4 millones de euros del primer semestre de 2016.
La firma incrementó sus ingresos un 0,7% en la primera mitad del año (-0,6% a tipo de cambio constante), hasta los 789,3 millones de euros, la mayor parte procedentes de su división de Energía e Industria que, aunque ha recortado sus ingresos, lo ha hecho a menor ritmo.
El consejero ejecutivo de Applus+, Fernando Basabe, ha subrayado que tras nueve trimestres reduciendo ingresos, en el segundo trimestre se ha conseguido que éstos evolucionen en línea con los reportados en el primer semestre de 2016.
Basabe ha destacado además que el margen del resultado operativo se mantuvo estable hasta junio y que las divisiones Idiada y Laboratories han registrado en el primer semestre crecimientos "más fuertes" de sus ingresos aprovechando las condiciones favorables de los mercados en los que operan.
En todo caso, la compañía espera mejorar su posición en el mercado a medio plazo, en cuanto mejoren las condiciones adversas que han estado impactando sobre su división de Energía e Industria, de la que proceden dos tercios de los ingresos del grupo.
La deuda neta de Applus al cierre del primer semestre se situó en 69,4 millones de euros, cifra inferior a la del mismo periodo de 2016, lo que le ha permitido mantener estable el ratio de apalancamiento financiero.
Las expectativas de la compañía para el conjunto del actual ejercicio no experimentan cambios. Applus prevé que los ingresos orgánicos del grupo a tipos de cambio constante y el margen del resultado operativo se mantendrán en línea con los obtenidos en 2016.