La próxima semana los emisarios de la UEFA viajarán a España para reunirse con los principales operadores de televisión españoles y contarles de primera mano los detalles del concurso que han abierto a mediados de mayo para adjudicar las próximas temporadas de la Champions League.

Como ya adelantó EL ESPAÑOL una de las principales novedades de la nueva subasta es que a partir del curso 2018-2019 habrá dos partidos por jornada -a las siete y a las nueve- con lo que el dueño del fútbol europeo quiere aumentar las ventanas de emisión, la rentabilidad de las televisiones y el dinero que recauda por estos derechos.

Según ha podido saber este periódico, en estos momentos ningún operador ha presentado formalmente su propuesta, a la espera de tener su primer contacto con los representantes de la UEFA y conocer las claves de la negociación para posteriormente hacer números. La fecha límite de la presentación de ofertas es el 20 de junio y a partir de ahí comienzan las negociaciones individuales con cada operador.

No obstante, es muy probable que la mayoría presente finalmente su propuesta ya que todas las cadenas están interesadas en estos derechos. Mediaset y Atresmedia preparan sus ofertas dentro de un “marco de rentabilidad”, con la salvedad de que la primera pujará en solitario por el partido en abierto y la segunda lo haría con TV3 y Mediapro, que se quedaría con el resto de los partidos.

Movistar quiere quedarse con todos los partidos

Como también informó este periódico hace unas semanas, Movistar prepara una oferta para quedarse con todos los partidos, eliminando el encuentro en abierto por primera vez. Esta modalidad está en la línea del resto de televisiones europeas donde países como Reino Unido ya no emiten por esta ventana.

La UEFA tampoco se ha opuesto a acabar con este partido, modalidad que defendió en el pasado para dar más visibilidad a los patrocinadores. En diciembre indicaron que no mediarán para que existan encuentros en la televisión en abierto si es que estas propuestas no son competitivas.

Mediaset, Atresmedia, TV3, Mediapro, Movistar y... RTVE. La cadena pública participará al menos en el proceso previo a la presentación formal de las propuestas. Según ha podido saber EL ESPAÑOL, la intención de la cúpula de la cadena pública es firme, pero antes de tomar la decisión definitiva quieren medir la fuerza del resto de las ofertas y hablar con la UEFA para hacer números. 

Este periódico ha podido conocer que en el último consejo de administración de RTVE realizado esta semana el tema de la Champions League estuvo sobre la mesa. La dirección de la cadena se comprometió a seguir estudiando el tema y perfilar su propuesta si es que finalmente deciden presentarse. En cualquier caso, la autorización oficial para pujar debe pasar por el consejo, que deberá votar de manera electrónica, ya que la decisión deberá tomarse antes de la siguiente reunión formal convocada para finales de junio.

RTVE ya gastó 120 millones en la Champions

Esta autorización sería solo para presentar la oferta y participar en la puja. Si finalmente la UEFA decide aceptar la propuesta de RTVE, la cadena debería convocar un nuevo consejo para aprobar la asignación presupuestaria que permita comprar estos derechos deportivos.

¿Cuánto debería desembolsar RTVE? La cadena emitió este campeonato por última vez entre las temporadas 2012-2013 y 2014-2015 y según la última auditoría disponible de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) la Champions League fue la mayor inversión económica en programación durante este periodo.

El torneo costó a la cadena pública 18,4 millones de euros en 2015, 44,1 millones en 2014 y 43,9 millones en 2013, solo en derechos de emisión y sin incluir la producción de los partidos. TVE también emitió el torneo entre los meses de septiembre y diciembre en 2012, sumando un coste total que se acercó a los 124 millones de euros.

Antena 3 se adjudicó la emisión de la Champions League en abierto entre las temporadas 2015-2016 y la 2017-2018 con un coste medio de 40 millones de euros, gracias a su oferta conjunta con TV3 y Mediapro con unos costes no demasiado diferentes al anterior trienio, al menos para la televisión en abierto.

El operador en abierto debe pagar 150 millones

Esta temporada la UEFA quiere aumentar sus ingresos en un 30% como ya lo ha conseguido en otras negociaciones. Por ejemplo, en marzo se adjudicaron los derechos para Reino Unido a BT por un coste de 1.360 millones en tres años, un 31% más y sin partido en abierto. En la última puja en España, la oferta conjunta ganadora pagó casi 180 millones de euros por temporada, 120 millones de Mediapro, 17 millones de TV3 y otros 40 millones de Antena 3.

En el caso de la televisión en abierto, estas exigencias supondrían elevar la factura del abierto hasta los los 52 millones como mínimo y a los 156 millones por las tres temporadas que incluye el nuevo contrato de la UEFA. Esto quiere decir que, según las propias exigencias de los dueños del fútbol europeo, cualquier cadena en abierto que quiera participar debería poner sobre la mesa al menos una cantidad que iguale estos montantes.

Unas cifras que nuevamente abren el debate respecto a la participación de RTVE en estas subastas millonarias y en su acceso a los contenidos premium. La Champions League es sin duda el mejor contenido deportivo que una televisión puede tener en estos momentos, solo comparable a un Mundial de Fútbol, pero con la diferencia de que la Champions genera mucho más interés entre los anunciantes y tiene una periodicidad anual.

En este sentido, fuentes del consejo de RTVE han indicado a EL ESPAÑOL que la cadena pública tiene que aspirar a ser “lo más competitiva posible”, dentro de los límites que establece la ley y respetando escrupulosamente los presupuestos anuales de la corporación. “No se puede pretender que Televisión Española sea un canal residual en audiencias y para ello debemos pensar que los contenidos premium son posibles para RTVE”, dicen estas mismas fuentes.

RTVE pagó 39 millones por la selección española 

La principal crítica de las cadenas privadas a RTVE es la sobrepuja. En diversos foros, tanto Atresmedia como Mediaset han criticado que las intervenciones de la pública en estas pujas casi siempre terminan en un crecimiento artificial de los precios.

El último ejemplo lo vivimos en los derechos de los partidos de clasificación de la Selección Española de Fútbol, cuando TVE pagó 39 millones de euros. El acuerdo incluía diez partidos oficiales por ciclo clasificatorio más otros dos de playoff en el caso de que la selección tuviese que jugar la repesca.

Con todo, 150 millones de euros tendrían difícil encaje en las cuentas de RTVE durante tres temporadas. El actual presupuesto de la Corporación establece un techo de gasto de 972,8 millones (1,1 millones menos que en 2016) y espera concluir el año en equilibrio. En 2016 lograron un superávit de 800.000 euros tras acumular pérdidas de 240 millones desde el año de 2010.

Considerando que en los dos últimos años se ha logrado el equilibrio presupuestario, sumar más de 52 millones de euros anuales a las partidas de costes por la Champions League supondría realizar un ajuste de costes similar, principalmente por la vía de recortar en los costes de la parrilla y la producción de programas.