Aunque España superó por amplio margen el umbral del 3% de déficit que marca el Pacto de Estabilidad (se quedó en el 3,6%), la Comisión de Ursula von der Leyen ha decidido este miércoles no lanzar un procedimiento sancionador por déficit excesivo contra nuestro país. Su principal argumento es que el desfase presupuestario es "temporal", ya que bajará al 3% este año y al 2,8% en 2025 sin necesidad de ajustes adicionales, por el simple efecto del crecimiento económico.
No obstante, el Ejecutivo comunitario avisa de que el Gobierno de Pedro Sánchez podría incumplir las reglas fiscales este año y desviarse del techo de gasto que le exige la Unión Europea. En este sentido, Bruselas asegura que seguirá vigilando la situación en nuestro país y volverá a evaluar la situación en otoño por si tuviera que tomar nuevas medidas.
De los 10 países que superaron el límite del 3% de déficit en 2023, la Comisión Europea ha decidido lanzar procedimientos sancionadores contra Francia, Italia, Bélgica, Hungría, Malta, Polonia y Eslovaquia. Además de España, se salvan del expediente República Checa y Estonia. Se trata de la primera vez que Bruselas pone en práctica las nuevas reglas de disciplina fiscal, tras cuatro años seguidos de barra libre de gasto público debido primero a la pandemia y después a la guerra en Ucrania.
"Para España, el incumplimiento del déficit es temporal. Según las previsiones de primavera de la Comisión, se prevé que el déficit vuelva a situarse por debajo del valor de referencia (del 3%) en 2024 y 2025, sin medidas adicionales", argumenta el informe del Ejecutivo comunitario.
"Como no se requeriría ningún ajuste adicional a España para rebajar su déficit por debajo del 3%, iniciar un procedimiento por déficit excesivo no serviría, en esta fase, para ningún propósito útil. En cualquier caso, la Comisión continuará supervisando la evolución presupuestaria en España y volverá a evaluar la situación en otoño", señala Bruselas.
Sobre todo, porque el Gobierno de Sánchez va camino de incumplir las recomendaciones presupuestarias que la UE le dirigió en 2024. En su informe, el Ejecutivo comunitario señala que el gasto primario neto financiado a nivel nacional aumentará este año un 3,8%, muy por encima del techo máximo del 2,6% que había fijado la UE como techo. "Esto podría no estar en línea con lo recomendado por el Consejo", apunta el Ejecutivo comunitario.
El Gobierno de Sánchez sí tiene previsto suprimir paulatinamente todas las ayudas energéticas, en línea con lo que le pide Bruselas. Su coste se reducirá del 0,9% del PIB en 2023 al 0,2% en 2024 y al -0,1% en 2025. Sin embargo, la Comisión censura que "los ahorros previstos no van a usarse en su totalidad para reducir el déficit", lo cual también supondría otro incumplimiento de las recomendaciones de la UE.
En materia de deuda pública, Bruselas alerta de que "el análisis de sostenibilidad de la deuda indica riesgos elevados a medio plazo". La tasa de deuda pública (que es la cuarta más alta de la UE) bajará ligeramente al 105,5% del PIB este año y al 104,8% en 2025, pero después volverá a subir de nuevo hasta llegar al 113% en 2034. "La trayectoria de deuda es vulnerable a shocks macroeconómicos", apunta el informe.
"Para España, la desviación se considera temporal, ya que el déficit se situará en el 3% en 2024, según nuestras previsiones de primavera. En cualquier caso, la Comisión seguirá supervisando la evolución de la situación presupestaria en España y reevaluará la situación en otoño", ha dicho el comisario de Asuntos Económicos, Paolo Gentiloni, en rueda de prensa.
Reforma fiscal
En sus recomendaciones de política económica que también se han hecho públicas este miércoles, Bruselas reclama al Gobierno de Sánchez que presente en plazo (para el 20 de septiembre) el plan de ajuste plurianual que exigen las nuevas reglas fiscales. De cara a 2025, el techo de gasto debe ser lo suficientemente estricto como para situar a la deuda en una senda claramente descendente y garantizar que no vuelva a superarse el límite del 3%.
Como garantías adicionales de sostenibilidad fiscal, la Comisión pide "revisar y simplificar el sistema tributario con el fin de apoyar el crecimiento económico y el empleo, la cohesión y la transición verde". La reforma fiscal es una de las condiciones exigidas por la UE a cambio del quinto pago de los fondos Next Generation. Bruselas recomienda además "mejorar la calidad, eficiencia y equidad del gasto público".
El Gobierno de Sánchez debe además "hacer frente a los retrasos emergentes para permitir una ejecución continuada, rápida y eficaz del plan de recuperación y resiliencia, garantizando que las reformas e inversiones hayan sido completadas para agosto de 2026". En este sentido, Bruselas recomienda "reforzar la capacidad administrativa para gestionar los fondos de la UE", incluyendo los de cohesión
Pese a las reservas de Bruselas, ha sido el propio presidente del Gobierno el que ha durante la sesión de control en el Congreso que España se libraba del expediente sancionador por déficit excesivo y ha celebrado la noticia. El Gobierno ha expresado además su satisfacción por que nuestro país ha salido del grupo de Estados miembros que registran desequilibrios económicos. Un grupo en el que sí figuran Italia, Países Bajos, Alemania, Chipre, Hungría, Suecia, Grecia, Eslovaquia o Rumanía.