Los precios mantienen la senda descendente y mantienen el alivio a los bolsillos españoles. La inflación anual sigue moderándose y en noviembre subió un 3,2%, según los datos adelantados por el Instituto Nacional de Estadística. Esta cifra supone una caída de tres décimas respecto a la de octubre.
Esta reducción se debe a la bajada del precio de los carburantes y de los paquetes turísticos. Además, el alza del precio de los alimentos y las bebidas no alcohólicas es menor que el registrado el año pasado. El precio de la electricidad sigue cayendo, pero su caída es inferior a la de noviembre de 2022.
Con la rebaja de noviembre, el Índice de Precios al Consumo (IPC) reinicia su senda de caídas tras dos meses estancado en el 3,5%. Para la vicepresidenta del Gobierno, Nadia Calviño, estamos ante una buena noticia que "permite que los salarios vuelvan a ganar poder adquisitivo y ayuda a que las empresas sean más competitivas".
Por su parte, la inflación subyacente (es decir, sin alimentos no elaborados ni energía) disminuye siete décimas hasta el 4,5%.
Ahora habrá que esperar al 14 de diciembre, cuando el INE debe publicar el dato definitivo. Será entonces también cuando sepamos exactamente cuánto se van a revalorizar las pensiones en 2024. Con este dato adelantado, las contributivas aumentarán un 3,8%, que es la media del IPC entre noviembre y noviembre.
Si se analizan los datos en términos mensuales (noviembre sobre octubre) el IPC cae cuatro décimas después de cinco meses de alzas consecutivas.