Marruecos exige a la UE un pacto estratégico para que los pesqueros españoles vuelvan al Sáhara Occidental
Rabat reclama algo más que un acuerdo económico con Bruselas y recuerda que tiene acuerdos con otros países.
19 julio, 2023 13:23Rabat aspira a una asociación estratégica con la Unión Europea para permitir que la flota de pesca comunitaria y española vuelva a las aguas del Sáhara Occidental. En concreto, el Gobierno de Marruecos reclama a Bruselas un acuerdo que sea mucho más extenso de los 50 millones de euros que ya se pagan por las 138 licencias que estaban vigentes hasta el pasado lunes.
Esa será la postura que van a mantener sus negociadores en la próxima reunión prevista en Bruselas dentro de unas semanas. De hecho, el ministro de Exteriores, Nasser Bourita, ha sido el encargado de hacer pública la posición.
Rabat aspira a un nuevo pacto con "un valor añadido más claro", porque "Marruecos ve superado el modelo de venir a pescar", aseguró Bourita en una rueda de prensa la semana pasada. Hay "una reflexión en el Gobierno marroquí sobre qué actitud adoptar" respecto a los ejes de cooperación con la UE.
En concreto, se trabaja en distintos ejes: salvaguardar los recursos pesqueros, desarrollar una flota de alto rendimiento y potenciar una industria sostenible. En ese sentido, el país vecino ha firmado en los últimos tres años acuerdos y alianzas con otros países para desarrollar la industria de la pesca: Rusia, Japón, China y Reino Unido.
No sólo eso. Encima de la mesa se podría poner también el reconocimiento del Sáhara Occidental, algo que tiene mucho más importancia para Rabat que la parte estrictamente económica del acuerdo.
Fue este lunes cuando expiró el acuerdo de pesca entre la Unión Europea (UE) y Marruecos después de cuatro años en vigor. En la práctica supuso la suspensión de la actividad de la flota pesquera española y comunitaria durante, al menos, varios meses en los abundantes caladeros de las aguas del Sáhara Occidental. Mientras, los barcos de Rusia, China, Japón y Reino Unido podrán seguir faenando en ellas.
Los pesqueros españoles son los más perjudicados. De las 138 licencias europeas, 93 son principalmente para buques de Canarias, Andalucía y Galicia. Con todo, este último año han faenado sólo 19 de ellas, después de que en 2018 se quedaran un año inactivas, y teniendo en cuenta que tendrían que volver a estar pendientes de la justicia por la explotación de los recursos naturales del Sáhara Occidental como si fueran marroquíes.
El TGUE
Cabe recordar que el Tribunal General de la Unión Europea anuló en septiembre de 2021 este acuerdo comercial por incluir en él las aguas del Sáhara Occidental sin consultar con su población.
El Consejo de la UE y Marruecos presentaron entonces un recurso de apelación. Sin embargo, la decisión última la tiene la máxima estancia de Justicia de la UE, y no se dictará antes de finales de año o, incluso, a principios de 2024. Al menos hasta entonces los buques comunitarios no podrán acceder a estos caladeros.
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La justicia europea considera al Frente Polisario como el interlocutor en referencia sobre los recursos naturales del Sáhara Occidental que se están explotando. Es más: el 92% de las capturas se efectúan en aguas saharauis.
El abogado del Frente Polisario en la Unión Europea, Manuel Devers, ya anunció en una entrevista con EL ESPAÑOL que los dirigentes saharauis están dispuestos a negociar con los pescadores españoles. En todo caso, para ello necesitan el consentimiento de España y la UE.
"El Frente Polisario está dispuesto a negociar desde 2016. Los pescadores españoles tienen que irse, y la culpa es de Marruecos y la UE, son los responsables, no el Polisario que está dispuesto a negociar", precisó Devers.
Acuerdos
Mientras tanto, Marruecos exhibe sus acuerdos pesqueros con terceros países. Principalmente con Rusia, país con el que mantiene un acuerdo de cooperación en pesca marítima desde 1992, que se renovó por octava ocasión en 2020.
Al igual que el de la UE, es por cuatro años y establece el marco jurídico que permite a una flota de diez barcos rusos pescar especies pelágicas pequeñas más allá de las 15 millas náuticas.
A cambio recibe una contribución económica anual que representa el derecho de acceso al recurso, el canon anual y los derechos de regulación de las licencias de pesca. Igualmente prevé una cooperación científica y técnica para la vigilancia del ecosistema pelágico en aguas marroquíes entre el Instituto Nacional de Investigación Pesquera y su homólogo ruso.
Asimismo, dicho acuerdo permite a los estudiantes marroquíes beneficiarse de becas de formación en instituciones rusas especializadas en la pesca marítima.
Por su parte, Marruecos mantiene una asociación en el sector de pesca con Japón desde 1985. Precisamente, este mes de junio, firmaron el acta relativa a la ejecución de un proyecto de desarrollo de la acuicultura en territorio marroquí.
El proyecto, que tendrá una duración de tres años, tiene como objetivo "mejorar y diversificar las actividades acuícolas en los pueblos costeros con vistas al crecimiento azul", según publicó la agencia marroquí de noticias MAP.
Acuicultura
Por otro lado, el 4 de julio, los ministros de Agricultura y Pesca de Marruecos y China rubricaron un memorando de entendimiento para reforzar la cooperación, especialmente la pesca, la acuicultura, la tecnología de transformación de productos del mar, la agricultura biológica y la tecnología de transformación, almacenamiento y transporte de frutas y hortalizas.
Tras el Brexit y su salida de la UE, Reino Unido rubricó un acuerdo comercial con Marruecos que garantiza a las empresas británicas el derecho a desarrollar sus actividades comerciales y económicas en todo Marruecos, pero también en ciudades del Sáhara Occidental como Dajla.
El diputado británico Liam Fox señaló en declaraciones a la MAP que "la región de Dajla-Ued Eddahab se ha convertido en un importante centro de operaciones, dado su enorme potencial y sus activos, que constituyen una fuente de inversión para muchos operadores económicos extranjeros, en particular inversores británicos".