No solo el PIB ha crecido más de lo esperado en este 2022. Según los datos del Ministerio de Asuntos Económicos, los márgenes empresariales han recuperado vigor y ya suponen, aproximadamente, el 10,4% de las ventas. Sin embargo, si se excluye de este cálculo los márgenes de refino y mayoristas energéticos (sectores que han disparado sus ganancias), en términos generales el beneficio de las empresas está en el 9,9%, dos décimas por debajo de los niveles previos a la pandemia.
Pese a esta marcada resurrección de los márgenes, fuentes del equipo de Nadia Calviño aseguran que esta evolución no está detrás del incremento de los precios del último año y medio. Y recuerdan que numerosos sectores estuvieron funcionando con unas pérdidas "brutales" durante 2020 y 2021.
En un encuentro con periodistas, Asuntos Económicos ha expuesto esta información, recolectada a través de indicadores de alta frecuencia. Son estos indicadores los que les están permitiendo estimar que, en términos generales, en el sector de la distribución los márgenes no están creciendo más que en el resto (aunque no descartan que pueda estar sucediendo en algunas empresas).
Refinadoras y mayoristas
Harina del otro costal son los márgenes de las empresas de refino y los mayoristas energéticos. En este sentido, Economía ha defendido la puesta en marcha del impuesto a las empresas del sector para limitar el efecto de un beneficio disparado.
Por otro lado, basándose los datos recogidos a través de microanálisis, desde el equipo de Calviño aseguran que las bajadas del IVA de varios alimentos que se han puesto en marcha desde principios de enero se están aplicando por parte de lo comercios, pese a las sospechas desatadas en dirección contraria por la parte de Unidas Podemos del Gobierno.
Asuntos Económicos niega que se puedan estar dando, por ahora, los temidos efectos de segunda ronda en la inflación. Defienden que tanto salarios de trabajadores como márgenes empresariales están contenidos.
De hecho, esperan que los sueldos suban en 2023 más que en 2022, y que en paralelo la inflación siga su camino a la baja. La subida del PIB del año pasado del 5,5% levanta el optimismo del Gobierno, que espera un 2023 positivo.
El equipo de Calviño ha destacado la mayor aportación de los salarios a la economía, con un incremento de la productividad. También se han felicitado por el efecto que los 45.000 millones de euros invertidos en el 2022 ha tenido para "paliar los efectos de la guerra en Ucrania" en el PIB.
También han destacado el cambio en el empleo que ha sucedido por la reforma laboral, que ha llevado a que la contratación indefinida se dispare y a que la temporal se desplome a mínimos históricos.