Reino Unido ha anunciado este viernes un plan de medidas que busca reducir los impuestos con el fin de estimular el crecimiento de la economía del país.
El canciller de Hacienda de Reino Unido, Kwasi Kwarteng ha sido el encargado de anunciar el plan compuesto por 30 medidas destinadas a impulsar el crecimiento económico. Así, el Ejecutivo británico recortará la tasa máxima y la básica del impuesto sobre la renta.
También ha confirmado la eliminación del aumento en las contribuciones al Seguro Nacional y la reducción del conocido como impuesto de timbre para "ayudar a las familias que aspiran a tener una casa propia".
[Reino Unido limitará este invierno la factura energética de las empresas]
Kwarteng ha explicado que el Gobierno llevará a cabo una importante reorganización de las leyes de planificación para estimular la construcción de infraestructura y contribuir a su agenda de crecimiento. Además, ha enfatizado que el nuevo enfoque "agilizará las evaluaciones, valoraciones y consultas y terminará con las duplicaciones".
El plan también incluirá nuevas "zonas de inversión" con tasas impositivas más bajas, reglas de planificación liberalizadas y regulaciones ambientales simplificadas para las empresas y ayudará a crear puestos de trabajo.
Mayor recorte de impuestos
Con todo, el paquete de medidas representa el mayor recorte de impuestos desde el presupuesto de Nigel Lawson en 1988, según ha subrayado el Instituto de Estudios Fiscales del Reino Unido.
En esta línea, la primera ministra Liz Truss, declaró esta semana que está lista para tomar "decisiones impopulares", como aumentar los bonos de los banqueros para atraer empleos e inversiones.
De hecho, el propio gobernador del Banco de Inglaterra advirtió de que es posible que las tasas de interés deban aumentar aún más para amortiguar la demanda adicional causada por los nuevos recortes de impuestos del gobierno.
En las últimas dos semanas, el Gobierno británico ha anunciado que limitará las facturas de gas y electricidad para los hogares y las empresas. En concreto, limitará durante seis meses los precios energéticos en el mercado mayorista que se aplican a los contratos de gas y electricidad para las empresas.
Además, cada hogar pagará un promedio de 2.500 libras (unos 2.875 euros) al año tanto este invierno como el próximo. También anunció que mantendrá la ayuda de 400 libras para hacer frente a estas facturas.