El Gobierno ha aprobado en el Consejo de Ministros de este martes la subida salarial adicional del 0,5% para todos los empleados públicos. Se trata del último incremento correspondiente al año pasado, el cual estaba pendiente de si el dato adelantado del PIB de 2023 superaba el 2,4%, como así fue. De esta manera, el alza salarial de los empleados públicos el pasado año alcanza el 3,5%.

La pasada semana, en la Comisión de Hacienda y Función Pública, en el Congreso de los Diputados, el ministro José Luis Escrivá ya adelantó que el Ejecutivo aprobaría "en las próximas semanas" ese último tramo de la subida pactada con los sindicatos. Esta subida del 0,5% tendrá efecto retroactivo desde enero de 2023.

"La economía va bien y, por tanto, acompañamos los salarios de nuestros empleados públicos en esta coyuntura económica", ha señalado la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Fue precisamente Montero quien negoció con los sindicatos este incremento salarial la pasada legislatura.

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Como ha explicado la vicepresidenta, esta subida ya estaba prevista en las cuentas del 2023. El próximo paso es el incremento del 2% acordado para este año, que el Gobierno espera incluir en los nuevos Presupuestos Generales.

El acuerdo entre el Gobierno de coalición y los sindicatos CCOO y UGT, que CSIF decidió no firmar, establecía una subida salarial fija del 2,5 % para 2023, a la que podían sumarse dos incrementos adicionales de 0,5 puntos si se daban dos supuestos. El primero, vinculado a la inflación, ya se abonó el año pasado desde las nóminas de octubre; mientras que este último lo estaba al crecimiento económico a cierre de 2023.

Para 2024, el acuerdo establece un incremento salarial fijo del 2 %, al que podría sumarse un 0,5% adicional en función de la evolución de la inflación.