La Formación Profesional (FP) en España empieza a desprenderse del estigma que la perseguía. En los últimos años, ha pasado de ser una opción "de segunda" a una alternativa a la misma altura que los estudios universitarios y, en muchos casos, con más salidas y mejores salarios. 

Las empresas son las primeras que se apartan de esa imagen desprestigiada que arrastraba la FP en el pasado. Ahora, las compañías buscan los perfiles que ofrece: jóvenes con más formación práctica que teórica.

"En el pasado, era el patito feo de los estudios, para vagos y torpes. Hoy, para las empresas, es una lucha encontrar trabajadores con esta formación", admite el director de Randstad Research, Valentín Bote, a EL ESPAÑOL-Invertia.

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Esta opinión es compartida por el director de Talento de Adecco, Alberto Gavilán. "La FP se veía como lo que estudiaban quienes no iban a la universidad, pero ya es una opción de primerísimo nivel", comenta a este periódico.

Gavilán observa que en los últimos años se ha hecho un esfuerzo por parte del Gobierno y de las empresas para demostrar que la FP no está por detrás de los estudios universitarios. Las ofertas de empleo demandan casi en la misma proporción titulados con FP y con grados universitarios.

La ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría. Eduardo Parra Europa Press

Los problemas llegan a la hora de encontrar a los primeros, por la escasez de perfiles en el mercado. Las compañías buscan titulados en FP de las ramas de Tecnología y Tecnología aplicada de la comunicación, Fabricación Mecánica (electromecánicos, soldadores, torneros, mecatrónicos...), profesionales sanitarios, de edificación, rehabilitación de edificios o perfiles profesionales relacionadas con la sostenibilidad energética (Energía y Agua), como detallan desde el Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP).

Entre 2019 y 2023, el Gobierno ha creado 36 nuevos títulos, cursos de especialización y certificados de profesionalidad, muchos de ellos ligados a sectores emergentes. El último fue el Grado Medio de Técnico en Seguridad, aprobado en Consejo de Ministros a principios de este mes.

El MEFP también trabaja con más de 150 empresas, parte de la Alianza por la FP, para detectar nuevos perfiles profesionales y elaborar formaciones acordes.

"Es muy importante que se amplíen las titulaciones. Las empresas lo ven como una necesidad", apunta Gavilán.

Menos paro y mejores salarios

El perfil práctico de la FP también se refleja en los datos de empleo. Solo el 14% de los desempleados en España contaba con un título de FP, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), proporcionados por el MEFP. En el caso del desempleo juvenil, ese porcentaje era del 13,5%. 

"Cursar una FP bien orientada es una garantía de trayectoria laboral exitosa. Estoy absolutamente convencido de que el fomento de la FP reduciría el paro juvenil,", sostiene el director de Randstad Research.

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Bote y Gavilán coinciden en que la inserción laboral es inmediata en muchas titulaciones y los plazos para encontrar un primer empleo son muy cortos. El currículo formativo de la FP se adapta a lo que las empresas necesitan y estas compensan con salarios atractivos.

"No tienen nada que envidiar a los de los titulados universitarios", asegura Gavilán. Bote da cifras: "Los salarios de entrada están muy por encima de 2.000 euros netos al mes".