El Ministerio de Trabajo y Economía Social agotará la legislatura con otra tarea cumplida a contrarreloj. Según ha podido saber EL ESPAÑOL-Invertia, la cartera de Yolanda Díaz, CCOO y UGT han cerrado este viernes, tras más de un año de negociación, el principio de acuerdo sobre el Estatuto del Becario, pero sin el respaldo de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). 

La clave del desencuentro han sido las prácticas extracurriculares. Según fuentes de la negociación, la patronal habría pedido mantener barra libre al respecto. Sin embargo, el documento final establece que se limiten a un número de créditos universitarios muy delimitados.

De esta manera, tampoco se prohíben del todo las prácticas extracurriculares, dado que tanto universidades como un determinado número de alumnos las siguen reclamando.

"No es apropiada"

Aunque, oficialmente desde la CEOE no confirman su postura, voces de la cúpula de patronal aseguran que su posición es "contraria. Primero por la forma: no es apropiada la aprobación de esta norma en un periodo de disolución de las cámaras ni concurre la urgente y extraordinaria necesidad". 

Por otro lado, también cargan contra el fondo: "Limita tanto el número de horas e incrementa tanto la burocracia" para las prácticas extracurriculares "que perjudicará la formación práctica del alumnado, algo imprescindible para garantizar su empleabilidad y para tender puentes entre entre la formación teórica y el mundo del trabajo". 

Además, "hay discrepancias entre la regulación de esta norma y la normativa universitaria recientemente aprobada con lo que el riesgo de incurrir sanciones por falta de seguridad jurídica es alto". 

Por el lado de los sindicatos, el único que ha hecho valoraciones ha sido UGT, que admite que el acuerdo es "inminente. El texto recogerá gran parte de las demandas sindicales como son la definición clara de las prácticas para evitar fraudes, la compensación de gastos o el establecimiento de un régimen sancionador efectivamente disuasorio".

Reuniones

En las últimas semanas, tanto Trabajo como los sindicatos habían manifestado su intención de avanzar en el acuerdo. El secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, ya avanzó hace una semana que seguían negociando. Por su parte, UGT y CCOO indicaron este miércoles que iban a continuar con las reuniones, al margen de la postura de los empresarios. 

La negociación del texto comenzó en mayo de 2022, con un primer borrador del Ministerio de Trabajo y Economía Social que no convenció a la patronal. El segundo llegó en octubre de ese año, y contó con el aprobado de CCOO y UGT, ya que acababa de forma progresiva con las prácticas extracurriculares, con la idea de terminar con el fraude. 

La desaparición de las prácticas extracurriculares no gustó a la CEOE, que en un primer momento se opuso. La salida de la patronal aproximó el acuerdo entre los sindicatos y el Gobierno, aunque todo quedó en el aire cuando los empresarios decidieron reincorporarse a la negociación.

Trabajo presentó un tercer texto, en el que volvían a aparecer las prácticas extracurriculares para ganarse el respaldo de los empresarios. Sin embargo, el año de espera no ha servido para que la CEOE dé su visto bueno.