La Encuesta de Población Activa (EPA) arroja datos negativos sobre el mercado laboral. Según los datos del tercer trimestre de este año, que corresponden a los meses de verano, la tasa de paro se sitúa en el 12,67%, lo que supone 18 centésimas más que en junio. Mientras, la creación de empleo se queda en 77.000 puestos de trabajo nuevos, lo cual apunta a una ralentización, tal y como vienen indicando los últimos datos de la Seguridad Social.  

Esta cifra de ocupados contrasta con la que teníamos en el mismo período del año anterior. En aquel entonces la ocupación avanzaba en 359.000 personas. Pero es que si se compara con el segundo trimestre de esteaño la situación tampoco mejora, ya que entonces se registraron 384.000 ocupados más. Por tanto, la EPA deja entrever también que la economía española empieza a ralentizar su crecimiento. La duda está en ver si se encamina hacia la recesión o no. 

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), el número de parados subió en el tercer trimestre en 60.800 personas, un 2,08% más, y se sitúa en 2.980.200. Si bien el incremento es negativo, lo cierto es que, al menos, el dato de desempleo sigue por debajo de los tres millones. 

Con todo, y pese a este incremento, en los 12 últimos meses el paro ha disminuido en 436.500 personas (–12,78%) y la tasa ha descendido en 1,90 puntos.

Por regiones, los mayores incrementos del paro se producen en la Comunidad de Madrid (38.300 parados más) y en Comunidad Valenciana (23.300). Mientras, las mayores bajadas se han generado en Baleares (-22.500) y Castilla y León (-14.400). 

Por otro lado, pese a que el número de ocupados se incrementa y se sitúa en los 20,5 millones, el incremento (del 0,38%) es uno de los más bajos en los últimos seis años (solo por debajo de 2019). De hecho, en datos desestacionalizados, la variación trimestral es negativa, del –0,06%. 

Además, es el sector público el que 'salva' el expediente del empleo. En él la ocupación aumentó el doble que en el sector privado, con 52.300 y 25.400 trabajadores más, respectivamente.

En términos de asalariados, el aumento es de 99.000, según la EPA. Los que tienen contrato indefinido se incrementan en 444.200, mientras que los de contrato temporal se reducen en 344.900. 

El INE indica que donde mejora el empleo es el sector de los servicios (114.300 ocupados más) y de la industria (33.100). En cambio, baja en el ámbito de la agricultura (60.300 trabajadores menos) y en el de la Construcción (–9.400). En términos anuales, el campo es el único sector que pierde trabajadores (–32.500).

Estos datos indican que la crisis económica ya comienza a llegar al ámbito que hasta ahora venía mostrando signos de fortaleza: el empleo. Con todo, también hay luces entre las tinieblas laborales. 

Los hogares con todos sus miembros en paro bajaron en 12.900 en el tercer trimestre del año, un 1,3% respecto al trimestre anterior, hasta situarse en 977.400, su menor cifra desde finales de 2008. 

Además, los hogares con todos sus miembros ocupados subieron en 47.100 (0,4%), hasta un total de 11.294.200 hogares, nuevo máximo histórico.