Los datos de la Central de Balances del Banco de España dibujan una realidad diferente a la de los datos del Gobierno. Mientras los titulares del paro de este jueves muestran que ya es menor que en noviembre de 2019 y la afiliación es superior, los economistas de esta institución consideran que el empleo efectivo es todavía un 9% inferior a los niveles previos a la Covid-19. Este dato no incluye los ERTE que contabilizan como ocupados en los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Algo similar ocurre con los beneficios empresariales. Mientras los últimos datos de recaudación indican que los beneficios de las empresas alcanzaron en los tres primeros meses la cifra más elevada de la serie histórica, 266.038 millones de euros (un 6,4% superiores a 2019), la Central de Balances trimestral dice que la rentabilidad empresarial todavía es muy inferior a antes de la Covid-19.
En términos de Valor Añadido Bruto (reflejo de la actividad), las empresas están todavía cerca de un 14% por debajo de los niveles prepandemia. Y en términos de Resultado Ordinario Neto (beneficio) el dato es un 40% más bajo que en 2019. Los últimos datos del INE establecían en un 10% la caída del beneficio empresarial frente a antes de la pandemia.
Recuperación desigual
Esta situación no es homogénea en todos los sectores. Por ejemplo, en energía e industria, los excedentes están ya próximos a los valores anteriores a la pandemia. Mientras, en los servicios (fundamentalmente, en los ligados al turismo) los datos son todavía muy débiles en comparación con 2019.
"La recuperación que está habiendo en la actividad es incompleta y heterogénea", explican desde la dirección general de Economía y Estadística del Banco de España.
La Central de Balances parte de las conclusiones de una encuesta periódica a una amplia muestra de sociedades no financieras que parte de una base de 800.000 empresas. En este caso, han participado 909 empresas para los datos trimestrales y 465.362 para los anuales.
La agricultura sería uno de los pocos sectores que ha salido reforzado de la Covid 19, ya que mantuvo sus cifras durante la pandemia y ha mejorado su facturación.
Una situación muy diferente a la de otras actividades económicas, como las relacionadas con la hostelería, el refino de petróleo, los servicios sociales y cultura, la fabricación de materiales, el transporte o la industria textil.
Menos trabajadores
Toda esta situación tiene su reflejo en el empleo. Según el Banco de España, el empleo medio era ya en el tercer trimestre de 2021 un 2,3% más alto que hace un año, cuando la economía todavía estaba muy afectada por la pandemia, ya que no se había iniciado el proceso de vacunación.
Pero las plantillas promedio en los tres primeros trimestres de 2021, todavía eran un 3,8% inferiores a las anteriores a la pandemia. En el caso de la industria, ese porcentaje era del 1,9% y en el de otras actividades (donde pesan mucho los servicios) un 5,5% inferiores.
En la comparación de los datos de empleo del tercer trimestre de este año con las cifras de 2019, se muestra que los niveles de empleo son todavía un 9% inferiores a los de antes de la pandemia.
Según explican fuentes de la dirección general de Estadística del Banco de España, estos datos esconden una mejora importante del empleo en las pymes, que estarían recuperando puestos de trabajo de forma más rápida que las grandes empresas.
La Central de Balances también se fija en la evolución de la deuda de las empresas y arroja un dato esperanzador: las empresas que acumularon más liquidez con carácter precautorio estarían empezando a normalizar su situación ahora que la confianza en la economía es mayor.
No obstante, problemas como el de la crisis de suministros son una amenaza para la lenta recuperación que en 2021 está experimentando el tejido empresarial español.