El Banco de España mejora su previsión de crecimiento al 6,2% y mitiga el impacto de la Covid en el empleo
Eleva el déficit de este año al 8,2% a pesar de que el rebote de la economía es mayor a lo esperado en marzo y no espera una normalización del turismo.
14 junio, 2021 14:01Con la vacunación avanzando a buen ritmo, la recuperación de las grandes economías mundiales y el previsible desembolso de las primeras entregas de los fondos europeos, el Banco de España ha mejorado en dos décimas, hasta el 6,2%, su previsión de crecimiento para este año. Este mayor optimismo le lleva a adelantar a finales del próximo año la recuperación de los niveles de PIB perdidos en la pandemia y lo que es más importante, a mitigar los efectos de la Covid-19 en el empleo.
Según las nuevas proyecciones macroeconómicas que ha presentado este lunes la institución, la tasa de paro se situará este año en el 15,6%, frente al 17% que había calculado el pasado mes de marzo.
En 2022, seguiría bajando, hasta el 14,7%, y a finales de ese año alcanzará un nivel inferior al que tenía España antes de la pandemia, cuando ya arrastraba un problema de empleo importante. Así, en 2023, la tasa de paro será del 13,7%.
Según ha explicado el director general de Estadística, Óscar Arce, la mejora del escenario del mercado laboral se explica por la extensión de los ERTE de mayo a septiembre (por el efecto reductor que tiene sobre la tasa de paro en el conjunto del año) y por la mejora de las perspectivas macroeconómicas, que siempre vienen acompañadas de más creación de empleo.
Esa recuperación de la actividad económica, también tendrá su reflejo en el aumento del 6,7% este año en las horas trabajadas. Ese avance seguirá, aunque a ritmos más moderados, en 2022 (+5,4%) y en 2023 (+1,8%).
Con estas proyecciones, el Banco de España considera que "las huellas que dejará la crisis sobre el tejido productivo y laboral en términos de destrucción de empresas y de aumento del desempleo estructural" serán "limitadas" gracias al apoyo que los poderes públicos han dado a la economía en esta crisis con una política monetaria y fiscal expansiva.
Sin embargo, esto no significa que la economía vaya a ser capaz de pasar página pronto. El organismo advierte que "el impacto de la crisis sanitaria será relativamente persistente", si bien a finales de 2023, el nivel de PIB estar 1,9 puntos por encima del de 2019.
De hecho, según ha reconocido Arce, "todavía es pronto para establecer cuáles van a ser los daños de esta crisis" en ámbitos como el del número de empresas destruidas. El volumen de quiebras estará condicionado, entre otros, por los efectos que tengan las políticas de ayudas que se han ido poniendo en marcha, algunas de manera reciente.
En este contexto, la gráfica que ilustra esta recuperación sigue teniendo forma parecida a una raíz cuadrada, aunque con una tendencia más positiva de la que se dibujaba en proyecciones anteriores.
Además, la recuperación en términos de empleo va a ser desigual. Ramas como la hostelería y las actividades artísticas y recreativas aún se encuentran muy lejos de los niveles de empleo que alcanzaron en febrero de 2020, mientras que otras -como las de información y comunicación, educación, sanidad y Administraciones públicas- ya los han superado ese umbral.
Déficit elevado
Otra de las herencias dolorosas de esta crisis va a ser el déficit que todavía en 2023 permanecerá en "cotas muy elevadas", después de que la deuda pública alcanzara el 120% del PIB el pasado año. A falta de conocer el contenido de los Presupuestos, se estima que el déficit podría ser del 4,3% en 2022.
Este año, el déficit cerrará en el 8,2%, según este informe, lo que supone medio punto más de lo que se esperaba el pasado marzo. Algo que el director general de estadística ha explicado por las nuevas medidas adoptadas por el Gobierno, entre ellas, la prórroga de los ERTE.
Estas proyecciones son el "escenario central" que maneja el Banco de España. Sin embargo, en el contexto de alta incertidumbre en el que ha colocado la pandemia a la economía global, también se incorporan otra previsión más pesimista (con un avance del PIB del 4,6% este año) y otra más optimista (+6,8%).
Ahorro y turismo
Entre los elementos que pueden ser cruciales para que sea posible moverse de un escenario a otro figura el destino del ahorro que las familias han acumulado en los últimos 15 años.
Otro elemento al que prestan atención estas proyecciones es al turismo. Su escenario central es que las exportaciones de turismo alcanzarán en el tercer trimestre de este año un nivel cercano al 50% del registrado en el mismo período de 2019.
Se trata de un escenario que está lejos de un verano normal en términos de visitantes extranjeros y volumen de gasto de esos agentes, ha precisado Arce.
Con este telón de fondo, "la intensidad y el calendario preciso del repunte de la actividad siguen dependiendo, de modo crucial, de la evolución de la pandemia, del progreso en la campaña de vacunación y de la subsiguiente relajación de las medidas de contención", concluye el informe de proyecciones.