(Actualiza con declaraciones)
París, 6 feb (EFECOM).- La farmacéutica francesa Sanofi tuvo 2.806 millones de euros de beneficio en 2019, una caída del 34,8 % respecto al año anterior, en la que pesaron varios elementos no recurrentes.
Entre los factores excepcionales hubo sobre todo una depreciación de 3.604 millones de euros, vinculada principalmente al tratamiento para la hemofilia Eloctate, explicó Sanofi este jueves en la presentación de los resultados.
También pesó una carga de amortización de 2.146 millones, sobre todo por el ajuste en sus cuentas del valor de adquisiciones como Genzyme (727 millones de euros), Bioverativ (488 millones), Boehringer Ingelheim (240 millones) y Aventis (197 millones).
En el cuarto trimestre, la compañía incluso registró 10 millones de euros de pérdidas, comparados con los 254 millones de beneficio que obtuvo entre octubre y diciembre de 2018.
En el conjunto de 2019, el resultado operativo descendió a 3.125 millones, frente a los 4.676 en 2018.
Al margen de los elementos no recurrentes, el resultado neto de sus actividades aumentó un 9,8 % hasta 7.489 millones de euros.
Los ingresos anuales progresaron un 4,8 % en cifras absolutas (un 2,8 % en comparables), hasta 36.126 millones.
El consejo de administración propondrá a la junta el pago de un dividendo de 3,15 euros por acción, lo que de ser aprobado significaría la vigésima sexta subida anual consecutiva.
En cuanto a las perspectivas, Sanofi anticipa para este año un aumento de su beneficio por acción de alrededor del 5 % si se excluyen elementos excepcionales, y a condición de que no haya "grandes acontecimientos desfavorables imprevistos".
Interrogado en conferencia de prensa sobre por qué Sanofi no está trabajando activamente en una vacuna para el coronavirus chino, el consejero delegado, Paul Hudson, señaló que su objetivo no es conseguir titulares en los periódicos, sino trabajar sobre la realidad.
La dirección de Sanofi destacó que están observando cómo evoluciona la epidemia y que aunque otras empresas del sector han hecho anuncios, no han mostrado en qué elementos se sustentan.
Más allá de recordar que el coronavirus es un fenómeno nuevo, quiso ponerlo en perspectiva con las 500.000 muertes anuales que causa la gripe y subrayar la efectividad de las vacunas para esa enfermedad que pueden reducir esa mortalidad.
Sobre la reciente imputación de Sanofi en Francia por su presunta responsabilidad en malformaciones congénitas de los hijos de mujeres tratadas con su antiepiléptico Dépakine, Hudson no quiso comentar el procedimiento en curso.
La dirección del grupo recordó que Sanofi advirtió desde los años ochenta al Ministerio de Sanidad francés de los efectos que había detectado de ese tratamiento de valproato de sodio, que comercializa desde 1967.