Madrid, 25 oct (EFECOM).- El director general adjunto al consejero delegado de Enagás, Juan Andrés Díez de Ulzurrun, ha señalado que quizá la electrificación "no sea la panacea" y que un balance de ésta con 'gases limpios' sería más barato que la electrificación absoluta.
Díez de Ulzurrun, que ha participado en un panel del XV Congreso Nacional de Cogeneración, organizado por las asociaciones de cogeneradores Acogen y Cogen, ha recordado que el 80 % de la energía consumida actualmente en el mundo es en formato molécula (como el gas) y un 20 % en forma de electrón (electricidad).
Ha añadido que para invertir esa relación se requerirían 17.000 millones por cada 25 % que se vaya pasando, lo que hace el proceso muy costoso, y por eso, cree mejor una combinación de electricidad con gases limpios.
También ha recordado que la retribución al sector del gas es menor que la del eléctrico, pues en 2019 la retribución reconocida al sector gasista fue de 3.057 millones de euros, frente a los más de 17.000 millones del eléctrico, lo que ha dicho se debe a que el coste unitario del transporte y la distribución de gas es menor.
Por su parte, la secretaria general de la patronal gasista Sedigas, Marta Margarit, ha recordado que el propio Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) contempla que el gas siga formando parte del suministro de energía hasta 2040 y más allá de esa fecha con los gases renovables.
Ha dicho que para eso hay que preservar la infraestructura que existe en España, a fin de que esté disponible hasta esa fecha, y para eso se necesita un entorno regulatorio estable y predecible.
Margarit ha añadido que en el futuro la electricidad va a ser muy importante, pero no la única energía, y se ha quejado de que se hayan puesto objetivos a 2050 sin saber qué tecnologías habrá en esa fecha.
Por su parte, Jorge Sanz, socio de la consultora Nera Economic y que presidió la comisión de expertos sobre Transición Energética y Cambio Climático, ha apostado por unas condiciones regulatorias neutrales para las diferentes tecnologías y que gane la mejor.
Ha afirmado que la cogeneración aporta valor y es eficiente, pero eso no significa que no necesite apoyo, pues a diferencia de un ciclo combinado no puede parar cuando no se precisa para el sistema eléctrico, ya que tiene que suministrar calor al proceso industrial, lo que hace que su coste variable medio sea mayor.
Sanz ha explicado que si un cogenerador no cubre los costes variables sólo con la venta de la electricidad, difícilmente va a recuperar los fijos.
Por su parte, el director general de Acogen, Javier Rodríguez, ha apostado por no perder ninguna instalación de cogeneración de las que hay ahora y mantener los 4.700 MW de cogeneración que hay operativos.
Ha recordado que, a finales del año pasado, 300 MW de cogeneración llegaron al final de su vida útil sin un nuevo marco regulatorio aprobado y el Ministerio de Industria extendió dos años por decreto-ley el que había, pero en más de dos años habrá 1.500 MW "en riesgo".
Por su parte, el director general de Operación de Red Eléctrica de España (REE), Miguel Duvison, ha indicado que sólo entre un 4 % y un 6 % de la potencia instalada de cogeneración está habilitada para participar en los servicios de ajuste, reservas que entran cuando no hay suficiente potencia para abastecer la demanda.
En su opinión, es poco y la cogeneración podría dar mucho más, aunque ha advertido de que el proceso industrial condiciona la aportación de los cogeneradores al sistema eléctrico.
Por otra parte, ha señalado que el gas llegará lejos en la transición energética, pero "acabará por ser marginal".
Por su parte, el responsable de regímenes especiales en la Subdirección de Energía Eléctrica de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), José Antonio Castro, cree que hay que rediseñar las actuales cogeneraciones para que puedan participar en todos los servicios del sistema, pues hoy no lo hacen porque el parque es muy reducido.