LetterOne, la firma inversora del empresario ruso Mijail Fridman, abandonará el capital del grupo Dia y venderá su participación del 29% en la compañía en caso de que, en lugar de su propuesta, salga adelante la del consejo de administración de la española. Una cuestión que se resolverá en la junta de accionistas prevista para el próximo 20 de marzo.
"Si el plan del consejo de Dia gana, nuestra opa está muerta y nosotros abandonaremos la empresa en ese punto. No valdría la pena gastar más tiempo en la firma", ha avanzado este miércoles en declaraciones a Efe el socio director de la división especializada en distribución de LetterOne (L1Retail), Stephan DuCharme.
La propuesta del actual equipo gestor de la cadena de supermercados incluye una ampliación de capital a la que LetterOne ya anunció que no acudiría, por lo que su participación se diluiría. DuCharme ha insistido en que están convencidos de su victoria y se ha mostrado confiado en que si su opa ve la luz verde, la banca acreedora de Dia aceptará sentarse a negociar para alargar los vencimientos de toda su deuda, una condición indispensable para la ampliación de 500 millones de euros.
"Creemos que la banca quiera esperar a la junta para hablar de este tema (...) La opción de no llegar a un acuerdo con ellos, una vez nos hagamos con el control, es muy poco probable", ha apuntado.
Según sus cuentas, la propuesta del consejo de Dia de ampliar capital en 600 millones de euros incluye 300 millones para atender el vencimiento de líneas de bonos, 147 millones para devolver a la banca algunos de sus créditos y el resto (unos 150 millones) a la recuperación de la firma.
Por el contrario, su proyecto de recapitalización por 500 millones incluye 300 millones para cubrir el vencimiento de los bonos y casi 200 millones en su plan de rescate para Dia, ya que pretenden que las entidades financieras acepten alargar los plazos de la deuda hasta 2023.
Si ninguna de las dos alternativas que hay encima de la mesa es apoyada por un número suficiente de accionistas en la junta, DuCharme ha explicado que la opa de LetterOne seguiría adelante y que el reto sería encontrar "un mecanismo para poner capital en la empresa" y evitar que incurriera en concurso de acreedores. Esa inyección de capital se produciría "después de la opa", por lo que, en su opinión, es clave "acelerar" los plazos.
"Creemos todavía en la inversión en Dia, en que conviene seguir invirtiendo, en el potencial de la compañía pese a que la situación financiera no es la misma que hace dos años; queremos invertir más dinero en Dia si la dirigimos", ha resaltado DuCharme, quien ha señalado que el éxito de la opa supone el control de la compañía y ha descartado elevar el precio de 0,67 euros ofrecido. "El precio es muy razonable con una prima muy relevante", ha dicho.
VISIONES DISTINTAS, PERO NO "GUERRA ABIERTA"
Pese al intercambio de reproches entre el consejo y LetterOne, el representante de esta última ha negado que exista una "guerra abierta" entre ambos y ha vinculado el enfrentamiento con el hecho de que ambas partes tienen una visión del negocio sensiblemente distinta. No obstante, DuCharme ha calificado de "irresponsable" la actitud del consejo, liderado por Borja de la Cierva, al amenazar con la posibilidad de que Dia incurra en insolvencia si su proyecto no es aprobado en la junta.
"Es irónico, porque creo que nos ayuda, si los accionistas se asustan van a acudir a la opa, no sé por qué el consejo hace esto. Aún así no creo que sea muy útil, crea incertidumbre entre empleados y proveedores", ha argumentado.
Preguntado por las suspicacias que despierta Fridman como inversor en algunos sectores, DuCharme ha subrayado que LetterOne cuenta con un equipo "altamente cualificado" y es propiedad de cinco dueños, y no únicamente del multimillonario ruso. "Es importante pensar en corporaciones y equipos, no en un único nombre", ha recalcado.
El llamado "plan de rescate" para Dia que propone la firma inversora coloca a España en el foco, donde pretende recuperar el segundo puesto en la clasificación de cadenas de supermercados. Actualmente, está tercera por detrás de Mercadona y Carrefour.
"Si no nos recuperamos en España, el plan no tendrá éxito. Sin embargo, si lo conseguimos, en un país con tanta competencia, será fácil exportar el modelo" a otros mercados, ha considerado DuCharme.