El uso de la vivienda como modo de estancia durante las vacaciones se mantiene en auge. El alquiler de este tipo de hospedaje ha aumentado un 75% en los dos últimos años, pasando de los 5 millones de usuarios registrados en 2014 a los 8 que se contabilizan en el III Barómetro del Alquiler Vacacional en España realizado por la Universidad de Salamanca en colaboración con la empresa de alquileres Homeaway.
El uso de la vivienda vacacional alcanza ya el 36% de todos los viajes que se realizan por ocio. Esto supone un incremento de un 2% con respecto al barómetro de 2014. El número de contrataciones ha alcanzado los 21 millones presentando un volumen de negocio de 12.318 millones de euros, según el estudio, lo que representa un 0,57% del PIB español. Para el Director General de Homeaway para el Sur de Europa, Juan Carlos Fernández, esta situación refleja que estamos ante “un sector cada vez más consolidado y que goza de buena salud”.
El informe, según ha explicado Pablo Antonio Muñoz, Catedrático de la Universidad de Salamanca y director del barómetro, recoge una muestra de casi 43.000 personas residentes en España usuarias de alguna vivienda vacacional, con un margen de “error de apenas un 2,24%”.
Como ha expuesto Muñoz, la tendencia turística está cambiando. Para las “estancias menores de una semana se tiende a reducir la preferencia del hotel con respecto a la vivienda”, ha afirmado. Según el barómetro, la duración del periodo vacacional se ha reducido un 69%, pasando de 8,22 noches a 5,7. No obstante, según el director del estudio, en repercusión económica “el dato se compensa con el aumento del número de viajes”. “Viajamos más veces pero el tiempo de la estancia cada vez es menor”, ha señalado.
También destaca el aumento del gasto en vacaciones. En total, el barómetro estima que el desembolso medio en una vivienda turística es de 2.352 euros durante toda la estancia, 449 para el alojamiento y 1.904 para el resto de gastos relacionados. La media para cada persona es de 449 euros.
Para Joseba Cortázar, manager de Homeaway en España, este tipo de condicionantes facilitan que cada vez “haya más propietarios que están dispuestos a poner su segunda vivienda en alquiler”.
ANDALUCÍA, LA MÁS DEMANDADA
En cuanto a la preferencia en los destinos, los españoles a la hora de alquilar una vivienda para las vacaciones se decantan por Andalucía, la Comunidad Valenciana y Cataluña. Los ciudadanos que más demandan el uso de este tipo de residencia son los madrileños, un 22%. Principalmente, son las familias las que más hacen uso de este tipo de hospedaje, un 45%, por encima de las parejas (32%) y del grupo de amigos (20%).
El precio sigue siendo la principal razón para la elección de este tipo de alojamiento seguido de la ubicación y el entorno. Entre los principales motivos del viaje pierde importancia el irse a la playa. A cambio, otras razones como disfrutar del tiempo libre con los acompañantes o escapar de la rutina.
Un aspecto significativo que resalta el barómetro es la cada vez menor antelación con la que los españoles realizan sus reservas de vivienda habitacional. Más del 50% de las peticiones se producen con una antelación de entre 15 días y 2 meses.
España, a la cabeza
La demanda de viviendas en las vacaciones está ligada a su presencia y valoración en internet. Las web específicas de alquileres turísticos son el principal medio para la elección del alojamiento. Como señala Fernández, “ninguna vivienda de este tipo puede permitirse tener comentarios negativos” y es que, cada vez más, las opiniones y experiencias anteriores ganan peso a la hora de tomar decisiones.
El auge de este hospedaje no se reduce sólo a nivel español, sino también a escala europea, ha explicado Fernández. En el portal de alquiler Homeaway, “España es el país más demandado por los europeos”, ha afirmado. Para mantener estos buenos datos, el director del portal de alquileres ha abogado por la creación de una legislación estatal que aglutine estas situaciones y aporte una mayor seguridad y estabilidad al sector.