Para la Reserva Federal (Fed) vuelve a ser la hora de apagar fuegos ajenos. Esta vez es el Brexit que tiene a los inversores con los nervios a flor de piel y la entidad estadounidense no es ajena. La presidenta de la entidad, Janet Yellen, ha reconocido su preocupación: "El Brexit es una decisión muy importante para Reino Unido y para Europa. Sí, lo hemos discutido y ha sido uno de los motivos para tomar las decisiones de hoy".
La presidenta de la Fed no ha querido ocultar su preocupación, al contrario, ha querido alertar de que "puede tener consecuencias para las condiciones económicas y financieras de todo el mundo", de hecho, ha reconocido que, en el caso de producirse la salida del Reino Unido de la Unión Europea, "tendría consecuencias para las previsiones económicas e impacto en el ritmo de subida de los tipos de interés".
El Brexit es una decisión muy importante para Reino Unido y para Europa. Sí, lo hemos discutido y ha sido uno de los motivos para tomar las decisiones de hoy
Para tranquilizar a los inversores, ha recordado que la entidad estará muy pendiente de lo que ocurra con el referéndum, lo que significa que los tipos bajos podrían prolongarse todavía más en el caso de que el Reino Unido optase por salir de la Unión Europea. El comunicado de la entidad asegura que prestará atención a mucha información en sus próximas reuniones, "incluyendo la lectura de los avances en la situación financiera e internacional”.
Mucho más gradual
El Brexit es un motivo de preocupación para los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto de la Fed (FOMC), pero no es el único. El mal dato de creación de empleo de junio, mes en el que sólo se crearon 38.000 puestos de trabajo nuevos frente a los 164.000 que esperaba el mercado, terminó por contagiar los ánimos de la entidad. La primera consecuencia ha sido que los miembros del FOMC han decidido mantener sin cambios los tipos de interés en su reunión de hoy, por lo que se quedan en una horquilla entre el 0,25 y el 0,5%. En esta ocasión no hubo discusión, todos los expertos de la entidad votaron a favor de mantener su política monetaria sin cambios.
Para este año, la media de miembros del FOMC todavía mantiene la opinión de que se subirán los tipos dos veces este año, pero con un ligero cambio: si en marzo sólo un miembro de los 17 estimaba que habría únicamente una subida de tipos este año, ahora ya son seis los que piensan así. Tanto ha cambiado su expectativa para los próximos meses que ahora hay seis miembros que creen que sólo habrá una subida de tipos este año y en marzo era únicamente uno quien lo creía así.
La recuperación económica sólo permitirá subidas lentas y graduales de los tipos de interés
En general, la mayoría de los banqueros de la entidad anticipan ahora una subida más lenta del precio del dinero. De este modo, tanto para 2017 como para 2018 sólo proyectan tres subidas de tipos cada año, frente a las cuatro que estimaban hace sólo tres meses. Es más, uno de los miembros del FOMC cree que ni en 2017 ni en 2018 la Fed podrá subir los tipos de interés.
La consecuencia es que en 2018 los tipos de interés estarán entre el 2,25 y el 2,5%, esto es más cerca del 2% que del 3%. Tanto han cambiado sus previsiones que en marzo ocho miembros del FOMC creían que para 2018 los tipos ya estarían por encima del 3% y ahora sólo dos lo esperan. Para Yellen, "la recuperación económica sólo permitirá subidas lentas y graduales de los tipos de interés".
Un crecimiento económico más lento
En estos tres meses, la visión de la Fed sobre la economía estadounidense y global ha cambiado mucho. El Brexit y mal dato de empleo de mayo han provocado un deterioro en las previsiones económicas que ha terminado por forzar ese cambio en la proyección de los tipos de interés. Sin embargo, Yellen ha recordado que "es importante no sobrerreaccionar a uno o dos datos económicos".
Para este año, los miembros de la entidad han rebajado en dos décimas su previsión central de crecimiento del PIB, que ha pasado del 2,2% al 2%. Y para 2017 la rebaja de la estimación ha sido de una décima, pasando del 2,1% a 2%. Una recuperación de la economía más lenta que todavía contrasta más con las previsiones que manejaban en diciembre, cuando subieron los tipos. Entonces, los miembros de la entidad esperaban un crecimiento de la economía del 2,3% para este año y del 2,2% para el siguiente. Además, esperaban tener que subir los tipos de interés dos veces este año, pero ya se ha pasado el primer semestre y todavía no los han podido, o no los han querido subir, ni una sola vez.