El impacto que el desarrollo tecnológico que está teniendo en todos los ámbitos de la sociedad y la economía también está llevando a las empresas del sector manufacturero a buscar nuevas formas de producir que sean más eficaces, más eficientes y más sostenibles.
Las ventajas que tecnologías emergentes como la robótica, la analítica, la inteligencia artificial, el blockchain, la computación cuántica, la nanotecnología o el internet de las cosas (IoT) presentan para la industria hacen que ésta se enfrente a un nuevo punto de inflexión en su desarrollo.
Tal es el grado de impacto que estos avances tecnológicos tienen en la industria que a nadie le extraña hoy en día oír hablar de la cuarta revolución industrial, también conocida como Industria 4.0. Sin embargo, no todas las compañías están adaptando sus instalaciones de fabricación a las nuevas tecnologías al mismo tiempo y de la misma manera.
De hecho, el Foro Económico Mundial advierte de que la industria manufacturera global se está quedando atrás en la adopción de tecnologías de esta cuarta revolución industrial.
Así, asegura que más del 70% de las empresas todavía están atrapadas en el "purgatorio piloto" y sólo un grupo selecto de fabricantes líderes pueden implementar la fabricación avanzada a escala, generando nuevos valores y experiencias de los clientes dentro de la fábrica o en todas las cadenas de valor.
Para reconocer a aquellas compañías que estaban utilizando todo el potencial que ofrece las tecnologías asociadas a esta cuarta revolución industrial para transformar el proceso de fabricación industrial, el Foro lanzó en 2018 junto a McKinsey & Company, su iniciativa 'Global Lighthouse Network'.
Esta red está compuesta por un aquellos fabricantes que muestran liderazgo a la hora de usar las tecnologías de la industria 4.0 para transformar fábricas, cadenas de valor y modelos comerciales, todo ello para obtener retornos financieros y operativos que les hagan ser más competitivos en el entorno actual, además en la mayoría de los casos con un enfoque sostenible.
El liderazgo de Asia
El Foro acaba de actualizar esta lista con la incorporación de 21 nuevas fábricas, que elevan a 90 el total de miembros de la red. Una lista en la que sigue habiendo solo una fábrica española, la de Henkel en Montornès del Vallès, Barcelona, y en el que dominan claramente las empresas asiáticas.
De hecho, más de la mitad de esos 90 'faros' de la innovación industrial se encuentran en el continente asiático, un liderazgo que se ha reafirmado aún más si cabe en esta nueva actualización de la lista, ya que trece de las 21 nuevas fábricas incorporadas se encuentran precisamente en Asia.
Por el contrato, tanto Europa como América solo han incorporado tres fábricas en cada región a la red global, constatando, salvo meritorias excepciones, el atraso de Occidente a la hora de apostar por dotar de alta tecnología a sus instalaciones industriales respecto a sus principales competidores de Oriente.
El Foro destaca que, en las visitas a estas fábricas, y en toda su cadena de valor, se muestra todo lo que es posible cuando las empresas unen una visión valiente, un liderazgo imaginativo y modelos de trabajo ágiles para maximizar el poder de las tecnologías digitales emergentes. Además, agrega que a medida que esta red crece, se demuestra que esta transformación es posible en todas las geografías y en todas las industrias.
Los nuevos faros de la innovación
Entre los tres nuevos faros europeos encontramos la fábrica de Flex en Althofen (Austria), la fábrica que el Grupo De' Longhi tiene en la localidad italiana de Treviso y la de Johnson & Johnson Vision Care en Londres. Todas estas compañías han apostado por tecnologías vinculadas a la cuarta revolución industrial para mejorar su eficiencia, agilidad y productividad o para compensar la creciente complejidad de su actividad.
En América, el Foro Económico Mundial incorpora a su lista la fábrica de Henkel en Toluca (México), fundada en la década de los 70; la de DePuy Synthes, la compañía ortopédica de Johnson & Johnson, en Bridgewater (Estados Unidos); y la de Protolabs en Plymouth (EEUU), un fabricante nativo digital que ha pasado de ser sólo un proveedor prototipos a un productor gracias a su apuesta por lo digital.
Por otro lado, entre las trece fábricas de Asia que se incorporan a estos faros está una de AUO en Taichung (Taiwan), la de CATL en Ningde (China), la CITIC Dicastal en Qinhuangdao (China), la de fábrica de lavadores de Haier en Tianjin (China), la de Schneider Electric en Wuxi (China) y la de Unilever en Taicang (China),
Por su parte, Foxconn coloca dos fábricas en esta lista, las que tiene en las localidades de Wuhan y Zhengzhou, al igual que Western Digital, que suma a la lista las de Penang (Malasia) y la de Prachinburi (Tailandia). La lista de nuevos faros asiáticos la completan las fábricas de Innolux en Kaohsiung (China), de LS ELECTRIC en Cheongju (Corea del Sur) y la de Sany en Pekín (China).
Entre las innovaciones empleadas por las empresas chinas se encuentran IA, el análisis avanzado de datos, el edge computing, la automatización flexible, el 5G, el internet industrial de las cosas (IIoT), estaciones de cobot modulares, plataformas de escaneo o planificación y soluciones de voz digital.
Por otro lado, el Foro suma a su red dos fábricas en Oriente Medio, la de Arçelik en Eskisehir (Turquía), que aprovechó soluciones agile para implementar, en dos años, más de 30 casos de uso avanzados en automatización, robótica y sistemas de IA; y la de Aramco en Abqaiq (Arabia Saudí), en la que la compañía petrolera ha capturado el poder de los datos, el análisis avanzado y la automatización.
Las fábricas más sostenibles
Por otro lado, la red global hace hincapié en esta nueva revisión de sus miembros en el impacto que tiene la implementación de tecnologías avanzadas como la robótica y la inteligencia en la cadena de producción a la hora de impulsar la sostenibilidad ambiental.
Así, pone de empleo el caso de una empresa del sector de la atención sanitaria, que combinando controles avanzados con tecnología verde para implementar un sistema automatizado alimentado por sensores logró reducir tanto su consumo de energía como sus emisiones de CO2.
Por este motivo, la iniciativa 'Global Lighthouse Network' ha creado en esta revisión una nueva categoría, la de Faros sostenibles, a la que se han incorporado de momento tres fábricas: la de 5G que tiene Ericsson en Lewisville (Estados Unidos), la de Henkel en Düsseldorf (Alemania) y la de Schneider Electric en Lexington (Estados Unidos).
"Los Faros de la Sostenibilidad dejan claro que, al darse cuenta del potencial de las tecnologías en la fabricación, las empresas pueden desbloquear nuevos niveles de sostenibilidad en sus operaciones y explorar una solución beneficiosa para todos: una mayor competitividad operativa al mismo tiempo que se comprometen con la gestión medioambiental", afirmó Francisco Betti, del Foro Económico Mundial.