Enrique Lores encarna el auténtico sueño americano. Siendo un estudiante de último curso en la Universidad Politécnica de Valencia, se dejó cautivar por unos ingenieros de Hewlett-Packard que promocionaban un programa de becas. Entró así como becario de una enseña ya entonces emblemática, creyendo que permanecería en la empresa durante uno o dos años… Tres décadas después, este español es el consejero delegado de la multinacional.
Más o menos coincidiendo con los inicios profesionales de Lores, en 1985, HP inauguró el centro internacional de I+D de Sant Cugat (Barcelona), o mejor dicho, el germen de la que a día de hoy es la mayor instalación de investigación y desarrollo del grupo fuera de Estados Unidos. Este campus al más puro estilo de Silicon Valley acoge la sede mundial de tres de sus negocios: impresión profesional, industrial y 3D. “El de Sant Cugat es uno de los centros de éxito que tiene la compañía. Con el tiempo ha ido creciendo, adquiriendo nuevas responsabilidades, nuevos negocios y ahora mismo desde allí se desarrollan nuevas tecnologías en segmentos del futuro y se manejan áreas de negocio de manera mundial”, constata Lores, en el marco de un evento virtual organizado por la Asociación APD.
“Para nosotros [Sant Cugat] es importante no sólo por lo que allí se hace, sino porque es un polo de atracción de talento. En el centro trabajan personas de más de cincuenta países; somos capaces de atraer talento de toda Europa y de muchas partes de América y de Asia, y esto lo convierte en un espacio con un nivel de energía altísimo, donde nada más entrar ya ves la pasión que la gente tiene por el trabajo que están realizando”, asegura.
“Además –continúa-, con el paso de los años se ha convertido en un centro de formación de directivos. Por eso seguramente HP sea –y lo es con seguridad en el mundo de la tecnología- la empresa multinacional con más directivos españoles. Esto se debe a todos los ejecutivos que han ido aprendiendo y creciendo en Sant Cugat y que con el tiempo, como en mi caso, han ido emigrando a otros países”. Otros altos ejecutivos españoles en la compañía son Santiago Morera, responsable mundial del negocio de Artes Gráficas, o Ramón Pastor, responsable mundial de impresión 3D.
El ‘problema’ o la ‘oportunidad’ para España
Lores reconoce que España no ocupa todavía la relevancia que debería en los terrenos de la innovación y de la tecnología. “Si hago una valoración ‘a la española’, diría que tenemos un problema. Si lo hago ‘a la americana’, diría que tenemos una oportunidad”, considera. Sin embargo, “contamos con la capacidad y con el conocimiento” necesarios. Asimismo, destaca el progreso acometido en nuestro país en los últimos años. “Cuando yo me fui a vivir a Estados Unidos, hace doce años, había muchas menos empresas españolas en Silicon Valley”. Desde entonces, también, “el mundo de la emprendeduría ha crecido muchísimo en España, y eso es algo que es visible desde otros países”, asegura.
Para el primer ejecutivo de HP, “a través de la tecnología se va a generar muchísimo valor en los próximos 10, 20 ó 30 años”, y por eso “como país tenemos que tener una presencia mucho más visible, con un mayor foco para ayudar a empresas aquello que otros, en otros países, ya están consiguiendo”.
Lecciones durante la pandemia
Durante la primera ola de la pandemia, el centro de Sant Cugat de HP colaboró en la fabricación de piezas para respiradores, dentro de un proyecto liderado por la Fundación COTEC. Además, en alianza con el Consorcio de la Zona Franca (CZFB) y Leitat (Tecnio), junto al CatSalut, desarrollaron el primer respirador de campaña impreso en 3D. “Durante estos últimos meses, hemos aprendido, una vez más, lo importantes que son los valores”. Ante la ausencia de referentes a los que acogerse, hubo que “volver a los valores fundamentales que dirigen nuestras empresas o nuestros principios como directivos, y seguir lo que éstos estaban dictando”.
Por otra parte, Lores vaticina que la velocidad del cambio va a continuar la escalada que hemos vivido en los últimos meses. “Incluso en esta situación estamos viendo oportunidades de negocio, oportunidades como sociedad y oportunidades como compañía. La tecnología tiene y va a tener un papel muy relevante haciendo que la gente pueda vivir mejor, desarrollando nuevos productos y servicios, y éste es el enfoque que desde HP vamos a mantener”. Y concluye con un consejo: “Es importante no tener miedo a los cambios. Hay que cuestionar constantemente el statu quo porque cualquier cosa se puede hacer de una manera mejor”.