En el panorama actual, donde la inteligencia artificial y la tecnología se han convertido en piezas clave del sector sanitario, una mesa redonda organizada por la Universidad Camilo José Cela y D+I - EL ESPAÑOL ha arrojado luz sobre estos avances y sus implicaciones.
Celebrada con expertos de renombre en el ámbito de la salud y la tecnología, la mesa redonda contó con la participación de figuras como el Dr. Jose Barberán de HM Hospitales, Juan Antonio Moreno Movilla -CIO de Arquimea Group-, Pedro Diaz Yuste -CEO de Savia-, Miguel Tablado -Apps, Data & AI Practice CTO de Kyndryl España-, Paco Estella -responsable de Health de Microsoft España-, y Lino González, director de los másters de Ingeniería, Robótica e IA de la UCJC.
En ese sentido, el Dr. Jose Barberán, de HM Hospitales, destacó la exigencia de precisión en la práctica médica, un aspecto que adquiere especial relevancia en el tratamiento de infecciones y resistencias a los antibióticos. "Los médicos tenemos aspectos en los que no podemos reducir más el margen de error", comentó.
En ese sentido, gracias a la implementación de tecnologías como la inteligencia artificial, han logrado disminuir significativamente el margen de error en el diagnóstico de infecciones en pacientes hospitalizados. "Nos reduce el margen de error del 20-30% al 10-15%", afirmó Barberán, subrayando la mejora notable en la precisión diagnóstica gracias a esta tecnología, lo que se traduce en reducciones de costes para los operadores sanitarios y de mejora de la calidad de vida de los pacientes.
Por ello, el Dr. Barberán manifestó una perspectiva positiva sobre la integración de la IA en la medicina. Lejos de percibir esta tecnología como una amenaza, la considera un recurso valioso que apoya y potencia la labor médica. "Los médicos queremos ser usuarios de la inteligencia artificial que nos facilite los procesos. Bienvenida la inteligencia artificial, que nos saque de la rutina y nos permita personalizar la medicina y facilitar la investigación clínica", concluyó.
En la misma línea, Lino González, de la UCJC, resaltó la importancia de adaptar la educación a las necesidades actuales, especialmente en el ámbito de la tecnología. Señaló que, en la UCJC, están muy enfocados en la digitalización y el desarrollo tecnológico en diversos campos, incluyendo la informática biomédica. Este enfoque muestra una clara intención de preparar a los futuros profesionales para un mundo donde la tecnología y la medicina están cada vez más entrelazadas. "Dentro de la parte formativa... tenemos un grado en ingeniería informática y un grado en robótica, pero también unidades de informática biomédica", explicó, resaltando la diversidad y la relevancia de los programas ofrecidos.
Además, González enfatizó la necesidad de una visión crítica en la educación, especialmente cuando se trata de la integración de la inteligencia artificial en campos como la salud. Comparó los métodos educativos actuales con los del pasado, señalando cómo la IA ha cambiado la forma en que se adquiere y se procesa el conocimiento. Sin embargo, resaltó la importancia de mantener un análisis crítico, independientemente de las herramientas tecnológicas utilizadas.
A su vez, Pedro Diaz Yuste, CEO de Savia, puso especial énfasis en la colaboración entre las distintas entidades de la sanidad privada en España y el rol emergente de la salud preventiva facilitada por la tecnología.
Yuste destacó la iniciativa colaborativa entre aseguradoras y hospitales privados en España, una medida que promueve la interoperabilidad de datos en el sector. "En España nos hemos puesto de acuerdo para compartir esos datos", señaló, enfatizando un esfuerzo significativo para mejorar la eficiencia y la eficacia en el manejo de la información sanitaria. Esta colaboración marca un paso importante hacia la optimización del tratamiento y la atención al paciente, demostrando cómo la cooperación entre distintos actores del sistema de salud puede conducir a mejoras sustanciales en la atención sanitaria.
Además, Yuste abordó la tendencia creciente hacia un enfoque preventivo en la salud, impulsado por la adopción de la inteligencia artificial. Puso de relieve cómo las personas están cada vez más involucradas en el cuidado de su salud, aprovechando las herramientas digitales para una gestión más proactiva y preventiva de su bienestar. La utilización de servicios de inteligencia artificial, como los ofrecidos por la plataforma digital de salud de Mapfre, representa un cambio significativo hacia la prevención y la autogestión en el ámbito sanitario.
Durante la mesa redonda, moderada por el director de D+I - EL ESPAÑOL Alberto Iglesias Fraga, el CIO de Arquimea Group, Juan Antonio Moreno Movilla, se enfocó en cómo la IA está revolucionando la investigación en el ámbito farmacéutico y médico.
Movilla destacó el papel de la inteligencia artificial en la aceleración del desarrollo de nuevos fármacos. Explicó cómo la investigación tradicional se basa en el análisis de moléculas conocidas, pero con la IA, se da un paso más allá: "En lugar de elegir moléculas que ya son conocidas... diseñamos con inteligencia artificial generativa esa molécula que buscamos", dijo. Esta aproximación permite un enfoque más eficiente y dirigido en la creación de medicamentos, reduciendo significativamente el tiempo de desarrollo y aumentando la precisión en la búsqueda de soluciones terapéuticas.
Además, abordó cómo la IA puede transformar la investigación médica, llevándola a una nueva dimensión. Habló sobre la posibilidad de realizar tratamientos personalizados casi a medida, un avance que cambiaría radicalmente el enfoque actual de la medicina. Esta personalización permitiría un cuidado más enfocado y adaptado a las necesidades individuales de cada paciente, lo cual es una de las promesas más emocionantes de la inteligencia artificial en el campo de la salud.
La visión de los tecnólogos
Miguel Tablado, de Kyndryl España abordó la importancia de considerar la inteligencia artificial como una herramienta aplicable en todo el espectro del cuidado de la salud, tanto para pacientes como para profesionales. Destacó que la IA puede proporcionar soluciones que anteriormente eran imposibles de lograr y mencionó específicamente el impacto de la IA en el diagnóstico del cáncer de mama, en estadios más tempranos. Además, señaló la relevancia de la IA en el tratamiento de enfermedades raras, donde la disponibilidad de grandes cantidades de datos etiquetados y balanceados es crucial para el desarrollo de modelos precisos y efectivos.
Tablado también enfatizó la necesidad de una formación continua y crítica en el uso de la IA en medicina. Mencionó que, aunque la IA puede aumentar la precisión en el diagnóstico, es esencial que los profesionales de la salud mantengan un enfoque crítico y no dependan excesivamente de la tecnología. Habló de la importancia de equilibrar el uso de la IA con la experiencia y el juicio humano, particularmente en situaciones complejas donde la inteligencia artificial podría no ser suficiente por sí sola.
Desde otra perspectiva, Paco Estella, responsable de Health en Microsoft España, introdujo el concepto de la IA como "copiloto" en el cuidado de la salud, destacando que la tecnología no está destinada a reemplazar a los profesionales médicos, sino a complementar y apoyar su trabajo. "Un copiloto que nos va a acompañar ni a sustituir ni tampoco a reemplazar ni siquiera porque no puede llegar a ciertas habilidades que obviamente un humano en este caso un humano especializado tiene que atender", explicó. Esta perspectiva pone de relieve la idea de que la IA y la tecnología en general deben ser vistas como herramientas que mejoran la eficiencia y la efectividad de los profesionales de la salud, no como sustitutos de su experiencia y juicio.
Además, Estella abordó la importancia de la sencillez y la eficacia en la interacción entre la tecnología y los usuarios, tanto profesionales como pacientes. Destacó que los sistemas de salud digital deben ser fáciles de usar y comparó la interacción ideal con la simplicidad de aplicaciones populares como WhatsApp. También enfatizó la necesidad de que estos sistemas estén debidamente certificados y respaldados por profesionales médicos, asegurando así su fiabilidad y seguridad
A la espera de una regulación apropiada
Todos los ponentes coincidieron en la necesidad de una regulación apropiada y equilibrada, así como en la importancia de contar con una regulación que favorezca la innovación basada en la inteligencia artificial, mientras se garantiza el buen uso de los datos personales. Se enfatizó que la protección de los datos de los pacientes es fundamental, especialmente en casos sensibles como el cáncer. Esto subraya la creciente necesidad de establecer un equilibrio entre el uso eficiente de la información y la privacidad del paciente. "Proteger los datos es esencial", se destacó, subrayando la responsabilidad de las instituciones sanitarias de manejar esta información delicada con el máximo cuidado.
Los expertos también abordaron la cuestión de la interoperabilidad entre los distintos sistemas de salud, tanto públicos como privados, y entre diferentes países. Subrayaron la importancia de compartir datos para mejorar el tratamiento y la atención sanitaria, a pesar de reconocer que la velocidad de implementación de estas iniciativas no siempre es la ideal. "Lo suyo es que podamos compartir datos entre las distintas compañías privadas y los centros públicos, entre los distintos hospitales e incluso entre distintos países", se mencionó repetidamente.
En conjunto, las discusiones de la mesa redonda revelaron un consenso claro: la regulación y la interoperabilidad no son solo desafíos técnicos o legales, sino también cuestiones éticas y prácticas que requieren una atención detallada. Los participantes subrayaron que, aunque la integración de la IA en la salud ofrece enormes beneficios, debe manejarse con una consideración cuidadosa de la privacidad, la seguridad de los datos y el bienestar de los pacientes.