La eficiencia energética con sello valenciano que reduce un 34% el consumo de una industria de la automoción

La transición energética es un reto inaplazable para la industria a escala global y los proyectos disruptores que están irrumpiendo en el mercado se convierten en herramienta prioritaria para desarrollar con éxito este reto mayúsculo.

La Comunidad Valencia da un paso al frente en la aplicación de estas nuevas tecnologías de la mano de la compañía Linkener Renovables y su propuesta de eficiencia energética encaminada al sector de la automoción.

Es precisamente en esta industria donde la eficiencia energética se ha convertido en determinante para su futuro, tanto en el proceso de fabricación como en el funcionamiento de los vehículos y sus componentes.

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Y es que la emergencia climática que atraviesa nuestra sociedad obliga a la generación de conocimiento para ponerlo al servicio de la industria en aras de ir dando lugar a un nuevo modelo económico más sostenible.

En este contexto, las medidas de eficiencia energética implantadas por Linkener permiten en la actualidad reducir un 34% el consumo de una empresa del sector de la automoción, un ahorro que podrá alcanzar hasta el 60% en la segunda fase de la instalación, que ya está proyectada.

Este caso de éxito ha sido presentado esta semana en el 12º Foro de Excelencia de los Clústeres de automoción españoles. Según se ha dado a conocer en el foro, en un periodo inferior a un año, la empresa ha recuperado el 40% de la inversión realizada.

En concreto, Linkener Renovables ha instalado, en una superficie de más de 4.500 m2 que esta empresa tiene en sus instalaciones, un total de 2.276 paneles fotovoltaicos de 2.101.814 MWh de energía solar al año, lo que permite que el 28 por ciento del total de su consumo eléctrico se obtenga de la fotovoltaica.  

Este caso de éxito ha sido presentado esta semana en el XII Foro de Excelencia de los Clústeres de automoción españoles.

Asimismo, con esta instalación fotovoltaica, la energía generada es aproximadamente un 90% más económica que la energía que se compra actualmente de la red eléctrica, lo que supone una importante reducción de los costes de producción, además de un ahorro de más de 175 toneladas de CO2 vertidas a la atmósfera.

El 12º Foro de Excelencia de los Clústeres españoles ha recogido todos los detalles de este caso de éxito, en una edición que ha contado con la participación del Clúster de Automoción de la Comunitat Valenciana (AVIA), y cuyo objetivo es "conocer el proceso de transformación de distintas empresas asociadas a los clústeres, para compartir conocimiento y evaluar la posibilidad de poner en marcha proyectos tractores que sean transversales a toda la industria y a todos los territorios".

Pero ¿cuál es la historia de Linkener Renovables que ha permitido arrojar estos resultados tan esperanzadores para la industria de la automoción? 

Esta compañía del sector de la automoción comenzó con la implantación de un sistema de telemedida, es decir, un sistema de contadores inteligentes que permite realizar una lectura al minuto y optimizar la potencia contratada, además de detectar y alertar de manera automática de las variaciones anormales en el consumo para, de esta forma, evitar penalizaciones de potencia. 

Esta instalación fotovoltaica se finalizó en diciembre de 2021 y hoy la empresa ya ha recuperado el 40% de la inversión, en dos años y medio habrá recuperado el 100%; es totalmente rentable

Javier Ormaechea, director de operaciones de Linkener

Esta circunstancia permitió obtener un registro histórico de consumo de gran relevancia para optimizar la potencia, detectando los aumentos de consumo anormales, las ineficiencias y alertando, así, de manera automática de estas variaciones.

"Esta instalación fotovoltaica se finalizó en diciembre de 2021 y, a fecha de hoy, la empresa ha recuperado el 40 por ciento de la inversión, lo que significa que, en poco más de dos años y medio, habrán recuperado el cien por cien de la inversión realizada", ha explicado Javier Ormaechea, director de operaciones de Linkener. 

"Debido a la demanda constante en el sector automoción y a la necesidad de almacenar piezas para determinados momentos del año, el ahorro de la energía se convierte en necesario para que esta no encarezca el valor de cada pieza fabricada y sean más competitivos en el mercado actual".

Autoconsumo fotovoltaico industrial

Un estudio realizado por Linkener ya destacaba que el autoconsumo fotovoltaico industrial supone ahorros de entre un 10 a 50% en la factura eléctrica, según las características de cada compañía.

Además, otra de las ventajas de este tipo de instalaciones es el retorno de la inversión. En el caso de las industrias tiene una media de seis años. Las instalaciones fotovoltaicas tienen una vida útil de 25 a 30 años por lo que las inversiones realizadas en fotovoltaica son rentables a lo largo de su vida útil.

Un estudio de Linkener destaca que el autoconsumo fotovoltaico industrial supone ahorros de entre el 10% y el 15% en la factura eléctrica

A través de este estudio se puede observar también cómo en el caso de industrias y pymes, es más rentable la instalación de autoconsumo fotovoltaico que por ejemplo en el caso de los hogares.

En las industrias, el consumo se realiza en horario de producción solar, 9 a 18 horas, lo que aumenta la tasa de autoconsumo, que se queda en la industria, y disminuye la tasa de excedentes que se vierten a la red eléctrica.

Oficinas ubicadas en Go Hub

Linkener se materializó en el año 2014 con su actual modelo de negocio. Su creador, un ingeniero industrial valenciano, encontró un nicho de mercado en la necesidad que las compañías tenían, en plena crisis económica, de reducir su factura energética.

Sus oficinas centrales están ubicadas en Go Hub, el espacio de 2.500 metros cuadrados en el que Global Omnium aloja en la ciudad de Valencia a cerca de 20 empresas especializadas en tecnologías disruptivas –machine learning, inteligencia artificial, big data, realidad virtual o robótica-.

Linkener distribuye y comercializa sus soluciones tecnológicas a través de asesores energéticos, comercializadoras eléctricas, consultores o ingenierías cuyos clientes son empresas, industrias, corporaciones y edificios públicos en los que se pueden poner en marcha las soluciones tecnológicas que desarrolla.