¿Imaginan asistir a un partido de la Euroleague F4 de baloncesto, el Open de Australia de tenis o los X Games de Aspe desde la comodidad de su salón? No fantaseen demasiado, la tecnología ya lo venía haciendo posible a través de las retransmisiones inmersivas que permiten disfrutar de estos eventos deportivos como si se estuviera a pie de pista.
Sin embargo, la startup española Yerba Buena VR (YBVR) da una vuelta de tuerca a estas propuestas de live streaming y se posiciona a la vanguardia del sector con el reto que afronta en este recién estrenado 2022 y que supondrá un salto cualitativo respecto a la tecnología que venía desarrollando hasta la fecha.
La compañía que nacía allá por 2016 en un garaje de Silicon Valley -concretamente, en la calle Yerba Buena, de ahí su nombre- aspira a poner los pilares del que será el metaverso de experiencias en eventos deportivos en directo de EEUU.
El reto es mayúsculo pero la empresa fundada por Sebastián Amengual (CTO), Constantino Villar (CCO), Víctor García (CPO) y Héctor Prieto (CEO) asume el desafío con una mochila cargada de experiencia y grandes logros en las retransmisiones inmersivas de acontecimientos deportivos de primer nivel por todo el mundo.
Tan sólo hay que echar un vistazo a sus últimos eventos, el más reciente de ellos, los X Games de Aspen que concluyeron el pasado 23 de enero. "Los fans en USA han podido ver las piruetas de esquí como si estuvieran allí mismo, como no se habían visto hasta ahora gracias al impresionante el despliegue de cámaras inmersivas (360/180) a las que los usuarios van a tener acceso", relata a D+I Héctor Prieto.
Otros casos de éxito han sido el Australian Open de Tenis y los virtual tickets de la Euroleague F4, "donde la media de tiempo que tuvieron las gafas Oculus VR los usuarios fue de 65 minutos en el partido de la final; nunca se habían reportado tiempos tan largos de permanencia con las VR Headsets disfrutando del mismo evento".
También han desarrollado un trabajo de impacto con la liga emergente de Fútbol Americano (Fan Controlled Football), "donde los usuarios votan la mejor posición del quarterback y, por lo tanto, la baja latencia es un factor crucial para el streaming en vivo del evento", precisa Prieto.
Su tecnología: la clave del éxito
Pero ¿a qué se debe su éxito? La clave hay que buscarla en su tecnología que permite una calidad de resolución para eventos en vivo como no se había visto hasta ahora. De momento, opera a 8K a 60 frames por segundo pero ya está trabajando en el desarrollo de soluciones 12k.
El usuario tan sólo necesita unas gafas de realidad virtual o cualquier otro dispositivo (iPad, ordenador...) para disfrutar del acontecimiento deportivo como si estuviera allí mismo y, además, puede elegir el punto de vista que prefiere; en la grada a pie de pista, al lado de un jugador o en el palco de autoridades. Todo sin salir de casa.
"Nuestra tecnología patentada se basa en técnicas de field of view optimization que aplicamos en un entorno multidispositivo, de forma que nuestros clientes tienen con nosotros una variedad de soluciones desde las más inmersivas (VR) a las más extendidas en Mobile y PC", indica el CEO.
Además, YBVR va un paso más allá al resolver el streaming inmersivo con un solo partnertecnológico de una manera sencilla y eficiente. "Desde las cámaras a las apps en los dispositivos de los usuarios todo se presenta en un solo partner, sin la necesidad de tener que acudir a puzzle tecnológico".
El otro aspecto en el que se ha especializado la startup y que constituye una seña de identidad de su proyecto hace referencia a la latencia de su producto. Lo hemos llamado Stadium y permite latencias menores a un segundo y, por tanto, brinda servicios inmersivos en el propio estadio como si la infraestructura se aplanara.
"La mejora con respecto lo existente es brutal. Las tecnologías streaming OTT tienen latencias de decenas de segundos, que es algo imposible de implantar en un estadio por el retraso que constituye con respecto a la acción que estás viendo/oyendo en directo", matiza el cofundador de YBVR.
Llegados a este punto del proyecto, la startup aborda un 2022 diferente en el que se plantea dar un salto al B2C -directo al consumidor- en Estados Unidos. "Estamos montando los primeros pasos del metaverso de las experiencias de eventos deportivos en directo en EEUU".
La estrategia de YBVR es lanzar una ronda de inversión Serie A a mediados de año que les permita acelerar el desarrollo de producto y captar los fondos necesarios para su campana de marketing B2C en este mercado.
Interoperabilidad entre metaversos: el reto
Para lograr su objetivo, la compañía cuenta con un equipo humano de más de 30 personas; dos en Asia, en Japón y Singapore; 8 en EEUU y el resto en España, casi todos en Madrid, aunque también cuentan con personal en Barcelona, Valencia y Valladolid.
El reto se asume con mucha ilusión por parte del equipo fundador y con confianza por el bagaje tecnológico y de conocimiento generado en estos años. "Es muy impresionante ver cómo afloran al entorno de negocio ideas y soluciones en las que se lleva trabajando mucho tiempo".
La interoperabilidad entre los distintos metaversos es para YBVR uno de los grandes retos de la tecnología y la sociedad actual y ahí están dispuestos a desempeñar un papel determinante.
"Pensamos que los metaversos se desarrollarán y evolucionarán rápidamente, en un entorno tan cambiante que será fundamental construir y contar con assets que sean intercambiables", incide Prieto.
Acelerada por Lanzadera
Según puntualiza el CEO: "El viaje hacia el metaverso de los deportes está siendo apasionante. Lo hemos ido llamando de varias formas según las modas en estos últimos cinco años, parece que ahora ya está en boca de todos y nuestra tecnología ha pasado de ser una curiosidad tecnológica a una necesidad de mercado".
En su última etapa, YBVR cuenta también con el respaldo de Lanzadera, la aceleradora del empresario Juan Roig.
El metaverso es una de las áreas de mayor impacto entre las empresas que han concurrido en esta aceleradora y donde también existen otros proyectos destacados como Uttopion y sus comunidades virtuales para música y deportes. El metaverso -con sus múltiples acepciones, unas más ajustadas que otras- ha llegado para quedarse.